Cartas al director

SUSPIROS REVANCHISTAS POR OTRA TRAGEDIA

 Con su eslogan perturbador y amenazante: "Ardereis como el 36", y a pesar de sus negativos recuerdos que cuando alguien se los menciona, entran en pánico y ponen en marcha a su jauría mediática, que bien dirigida y mejor engrasada económicamente, trato durante muchos años, de ocultar sus desgraciadas consecuencias, las que vivió el pueblo español, luego de aquella contienda fratricida, que también supo perdonar para buscar la reconciliación en su día, lo que no todos aceptaron y entre ellos, el ala más radical del PSOE que siguió conspirando soterradamente contra aquella modélica transición del 78 que asombró al mundo. A ella, mas que les pese y traten de ocultarlo, nos llevó Franco, quien ganó la guerra y evitó la caída de España en las garras del comunismo, los cuarenta años de paz y progreso en libertad que todos hoy disfrutamos, fue su obra maestra antes de morir. ¿Qué pretenden cobrarle estos cobardes que amamantaron de su obra cobardemente y henchidos de odio y resentimiento, pretenden ofrecer sus restos hoy, como un trofeo de caza mayor política? Amenazando al pueblo español con un nuevo Frente Popular y copiar sus andanzas desgraciadas de quemar iglesias, conventos, colegios católicos  y acabar con la familia y la clase media, les faltaría el último eslabón de su cadena provocativa, liquidar la oposición, como sea necesario. Los recuerdos de Calvo Sotelo, José A. Primo de Rivera y otros, están latentes conjuntamente con los asesinatos que ETA ejecutó en esta época democrática, con los que el PSOE negoció descaradamente, a pesar del asesinato de algún dirigente suyo. La catadura moral de las izquierdas no  tiene límites,  como utilizar la exhumación de Franco para saciar venganzas olvidadas por el pueblo español. Para disfrutar de su democracia, progreso y libertad, lo que ella nos proporcionó y orgullosos debemos sentirnos, defendiéndola y mejorándola. Jamás y nunca destruirla como algunos pretenden hoy.
Quienes están ligando su campaña electoral de forma directa o indirecta a la exhumación de los restos de Franco del Valle de los Caídos, están cometiendo un gravísimo error histórico, cuyo coste recaerá sobre todos los españoles que hace muchos años, unos olvidaron para propiciar reconciliación y otros, nacidos posteriormente, fueron engañados y obligados a aceptar una memoria histórica, ramplona y truculenta de un solo bando. Intentan seguir con su senda revanchista y propagandística para revivir odios y resentimientos comunistas de entonces. Pretenden ignorar aquella transición del 78 y sueñan con un república al estilo bolivariano. Su principal asesor es Rodríguez Zapatero, hoy mentor principal de Pedro Sánchez, e impulsor permanente del diálogo ramplón que ya tiene entrampada a la oposición venezolana y arruinado a su país, como también las esperanzas reivindicativas de los separatistas catalanes y vascos, para formar sus respectivas repúblicas. A estos últimos los utilizó P. Sánchez para su moción de censura. Falta saber que rumbo tomará estos días cuando sea efectiva la sentencia del Supremo Tribunal por el Golpe de Estado dado en Cataluña, o los EREs de Andalucía y sus condenados.
Isabel Díaz Ayuso dijo estos días lo que tanto molestó a la jauría izquierdista y sus tiralevitas a sueldo, incluyendo a los del fuego amigo, dentro de su propio partido, que durante muchos años guardaron silencio, e hicieron uso y abuso de sus complejos y cobardías para hacer comparsa embaucadora con una izquierda sin escrúpulos para mentir y amenazar. Solo quiso recordar aquellas palabras de Rita Maestre cuando, con su banda tomó la capilla de la Complutense: Ardereis como en el treinta y seis.
Lo que durante muchos años unos manipularon vulgarmente y sacaron pecho de su osadía y rencor para convertir el adversario político, en enemigo común y no pasa nada. Porque Franco y su sombra lo tapará todo. ¿Qué podemos esperar  de esta tropa de mentirosos, embaucadores y cobardes? El pueblo español ni es cobarde, ni desagradecido, a pesar de sus tragedias. Ya lo decía Pío Baroja.