Cartas al director

El Partido Popular y los nacionalismos separatistas

Hoy dan la nota discordante con la nueva dirección de mismo, que trata de reconducir el barco a buen puerto. El País Vasco hoy, igual que Cataluña ayer, trata de impedirlo y acercándose a su ventana discordante y asomando la cabeza también está Galicia. En las dos primeras ya fue barrido del mapa político, con la ayuda de sus complejos, cobardías y complicidades obscenas. En el de Galicia está preparando el mismo camino, tratando de vender una nueva ruta ensanchada de ese centro virtual y destructor, ignorando que fue este el causante del calvario que está viviendo el PP, mientras sus dirigentes veían para otro lado y guardaban un silencio cómplice, para rescatar parte de lo perdido. El PP necesita urgentemente comprensión y ayuda de toda su militancia, simpatizantes y amigos para poder devolverlo lo más pronto posible, a sus raíces fundacionales, donde sus valores y principios sean revitalizados. Sin apelativos discordantes de conveniencia los que ya sabemos a que conducen sus consecuencias. Levantamos la voz de alerta hoy.
Atrás quedará para la historia de nuestro partido lo sucedido en el País Vasco y Cataluña, con la entrega fraudulenta del PP, a los intereses separatistas donde dirigentes natos y valientes no sucumbieron a los entreguismos vergonzosos de quienes impusieron en el PP entonces,  sus ambiciones personales. A los intereses  fundacionales del mismo al que entregaron cobardemente con nocturnidad  alevosía Iturgaiz, María San Gil, Mayor Oreja, Ortega Lara, Abascal (Ordóñez y Miguel Ángel Blanco y otros muchos, víctimas de ETA que sumados a Vidal Cuadras, Albiol y otros dirigentes catalanes,  son hoy los referentes visibles para la recuperación urgente del partido. Estos brotes de disconformidad hoy en el PP vasco dónde se ceban y atacan a la valiente y hoy portavoz en el Congreso de los Diputados,  Cayetana Álvarez, mientras sus detractores intentan seguir los pasos del PSOE de Cataluña,y crear en el PP vasco, otro partido muleta, complaciente y cobarde con las andanzas separatistas.
Lo de Galicia es un ensayo muy peligroso y delicado, si se toman en cuenta los últimos resultados electorales. Ellos nos indican el declive emocional de quienes siguen fieles a nuestras siglas, pero los desconciertan movimientos muy extraños dentro del partido, como el ataque despiadado y absurdo hacia los partidos Ciudadanos y Vox. Las comparsas encubiertas con separatistas y socialistas o la palmaria pasividad ante los seudo dirigentes, que destruyen el partido son sus andanzas. Su miopía política no les permite reconocer que Cs y Vox. Ambos partidos fueron el refugio de millones de votantes nuestros, que huyeron de nuestra vera, avergonzados por los casos de corrupción, complejos y cobardías de muchos dirigentes, a los que hoy la nueva dirección del PP, con Pablo Casado a la cabeza, trata de rescatar y pedirles perdón, si fuera necesario, quienes se oponen a esta regeneración y retorno no podrán ser catalogados como dirigentes. Su intransigencia los delata e incluye en el fuego amigo, aquel que tantos destrozos  causó en nuestras filas y que seguir soportando mañana, tarde y noche en una Tv amiga, por los amaños truculentos del PP de entonces.
Nos unimos las derechas, o pareceremos todos como idiotas, no repitamos el camino oscuro de UCD, UPD y otros, hoy convertidos en minúsculos partidos o cadáveres in sepulcros, borrados del mapa político. No abusemos de la solidez de nuestra democracia. Ella se sustenta en la vigencia y legalidad de los partidos, respetando sus normas y leyes que la sustentan. Los abusos y corruptelas la destruyen. No permitamos, con nuestro silencio, un suicidio prematuro al amanecer. Ni tutelas, ni tutías, palabras siempre recordadas de nuestro fundador y guía Don Manuel Fraga (QDP).