Tras el batacazo de Sánchez en su último intento de toma de posesión, parece que a él no le entra en la cabeza, que el hecho de no reunir las condiciones necesarias para ser jefe de Gobierno, es la principal causa de ello.
Y cuáles son esas condiciones. Para empezar, la confianza, acompañada de la credibilidad, y sobre todo, de la responsabilidad.
Mientras tanto, Sánchez se dedicará a repetir todos los días su discurso rallado, de que la falta de acuerdos para formar nuevo Gobierno, es culpa del PP y Ciudadanos, y no suya. Y yo me pregunto: Acaso la culpa no será del PSOE, por proponer a un candidato que sólo crea crispación y confrontación. Si, crispación y confrontación, y un ejemplo claro de ello, es la pelea de sillones ministeriales con su principal aliado, los señores chavistas radicales de Podemos.
Ahora bien, si el señor Sánchez pide a PP y Ciudadanos que no le voten en contra en la investidura, lo lógico, digo yo, es que debería proponerles algo a cambio a dichos partidos, por ejemplo, algunos ministerios, como prueba de reciprocidad. Es decir, proponerles a PP y Ciudadanos, lo que ya Sánchez le propuso a Podemos: Unos ministerios sin importancia en donde podrían formar parte personas destacadas independientes propuestas por esos dos partidos.
Pero la propuesta de Sánchez es otra: Me dejan ser presidente a cambio de nada, o hay nuevas elecciones, y yo seguiré repitiendo que ustedes son los malos y los culpables.
Pero imaginemos, que al final los señores de Podemos ceden, y por carambola Sánchez es Presidente. Bueno, creo que no hay que ser un experto, para pronosticar, que ese otro nuevo Gobierno estilo Frankenstein, no duraría cuatro meses, ya que estarían tanto PSOE, como Podemos, en una guerra por ver quien consigue más votos para las nuevas eminentes elecciones generales en 2020.
Y los dirigentes del PSOE, PP y Ciudadanos, no conocen esa hipotética realidad de la autentica inviabilidad de un Gobierno Frankenstein con Sánchez? Pues, creo, que tienen alguna idea de ello. Tal es así, que dentro del PP y Ciudadanos, han salido voces proponiendo al PSOE, que si presentan otro candidato menos radical y fanático que Sánchez, como por ejemplo, Emiliano García-Page, o Josep Borrell, esos dos partidos estarían dispuestos a sentarse y llegar a acuerdos para que el PSOE gobierne en solitario.
La cuestión, es que Sánchez insiste que si no es él, habrán nuevas elecciones, y punto.
Señores del PSOE, el problema no es el PP o Ciudadanos. El problema, insisto, es Pedro Sánchez. Y por más que al final PP y Ciudadanos dejen gobernar a Sánchez, ese nuevo Gobierno Frankenstein no duraría ni cuatro meses. Y me pregunto: No sería mucho mejor que el PSOE proponga a alguien de su partido que reúna confianza, credibilidad y responsabilidad?. De seguro, ese nuevo Gobierno, duraría más de cuatro meses, y quien sabe, por primera vez, la gente empezaría a creer en los políticos.
Y cuáles son esas condiciones. Para empezar, la confianza, acompañada de la credibilidad, y sobre todo, de la responsabilidad.
Mientras tanto, Sánchez se dedicará a repetir todos los días su discurso rallado, de que la falta de acuerdos para formar nuevo Gobierno, es culpa del PP y Ciudadanos, y no suya. Y yo me pregunto: Acaso la culpa no será del PSOE, por proponer a un candidato que sólo crea crispación y confrontación. Si, crispación y confrontación, y un ejemplo claro de ello, es la pelea de sillones ministeriales con su principal aliado, los señores chavistas radicales de Podemos.
Ahora bien, si el señor Sánchez pide a PP y Ciudadanos que no le voten en contra en la investidura, lo lógico, digo yo, es que debería proponerles algo a cambio a dichos partidos, por ejemplo, algunos ministerios, como prueba de reciprocidad. Es decir, proponerles a PP y Ciudadanos, lo que ya Sánchez le propuso a Podemos: Unos ministerios sin importancia en donde podrían formar parte personas destacadas independientes propuestas por esos dos partidos.
Pero la propuesta de Sánchez es otra: Me dejan ser presidente a cambio de nada, o hay nuevas elecciones, y yo seguiré repitiendo que ustedes son los malos y los culpables.
Pero imaginemos, que al final los señores de Podemos ceden, y por carambola Sánchez es Presidente. Bueno, creo que no hay que ser un experto, para pronosticar, que ese otro nuevo Gobierno estilo Frankenstein, no duraría cuatro meses, ya que estarían tanto PSOE, como Podemos, en una guerra por ver quien consigue más votos para las nuevas eminentes elecciones generales en 2020.
Y los dirigentes del PSOE, PP y Ciudadanos, no conocen esa hipotética realidad de la autentica inviabilidad de un Gobierno Frankenstein con Sánchez? Pues, creo, que tienen alguna idea de ello. Tal es así, que dentro del PP y Ciudadanos, han salido voces proponiendo al PSOE, que si presentan otro candidato menos radical y fanático que Sánchez, como por ejemplo, Emiliano García-Page, o Josep Borrell, esos dos partidos estarían dispuestos a sentarse y llegar a acuerdos para que el PSOE gobierne en solitario.
La cuestión, es que Sánchez insiste que si no es él, habrán nuevas elecciones, y punto.
Señores del PSOE, el problema no es el PP o Ciudadanos. El problema, insisto, es Pedro Sánchez. Y por más que al final PP y Ciudadanos dejen gobernar a Sánchez, ese nuevo Gobierno Frankenstein no duraría ni cuatro meses. Y me pregunto: No sería mucho mejor que el PSOE proponga a alguien de su partido que reúna confianza, credibilidad y responsabilidad?. De seguro, ese nuevo Gobierno, duraría más de cuatro meses, y quien sabe, por primera vez, la gente empezaría a creer en los políticos.
