Cartas al director

El rebrote importado y la ansiada vacuna

Después de tres meses de confinamiento sería bueno saber cuáles son los planes del Gobierno para controlar sanitariamente a todos los turistas que empezarán a llegar a España de forma inmediata.
Supongo que a quienes nos visiten se les va a obligar a cumplir la normativa sanitaria que rigen para todos los ciudadanos del país, como es el uso de mascarillas y el mantenimiento de la distancia mínima de seguridad, pero dudo de que se puede llevar un control exhaustivo de los turistas como el que se ejerce sobre nosotros, y si esto no es posible no habrá servido de nada tanto confinamiento y la actitud responsable de la sociedad española que está respondiendo de forma muy civilizada para evitar nuevos contagios.
La apertura de fronteras al turismo exterior es una medida muy importante para un sector que tanto aporta a nuestro Producto Interior Bruto (PIB), pero si va a significar una inevitable fuente de contagios por falta de medios para controlar la entrada masiva y descontrolada de visitantes extranjeros, las autoridades sanitarias deberían tener previsto un plan de contención que desconozco, pues, de lo lo contrario, después del verano podemos tener sorpresas desagradables como puedan ser fuertes rebrotes que volverán a desestabilizar nuestra vida social y económica, y a poner en riesgo, de nuevo, la salud de todos. En definitiva, volver al punto de partida y tener que remar contracorriente en aguas turbulentas en espera de la ansiada vacuna que ojalá llegue antes de que sea demasiado tarde.