n n n Vigo se une este año a la manifestación “No a la caza” que se celebra el domingo 2 de febrero en más de 40 ciudades de toda España. A la protesta, que saldrá de Vía Norte, se unirán 17 protectoras de la provincia de Pontevedra y de la de Ourense, estando coordinada en este caso por Perrikus. También se sumarán a las marchas las ciudades europeas de Colonia, Ámsterdam y Toulouse. A nivel nacional la manifestación de la Plataforma NAC (No A la Caza) cuenta con el apoyo de más de 600 asociaciones, plataformas y partidos políticos, que por noveno año consecutivo saldrán a la calle para pedir el fin a los malos tratos y a la caza en especial.
Febrero es un mes especialmente crítico y señalado por coincidir con el fin de la temporada de caza con galgo. Según las protectoras, alrededor de 50.000 perros de esta raza son descartados cada año. A esta cifra habría que añadir podencos, setters, pointers y otros perros utilizados para la caza. Esto es así porque muchos de ellos no son válidos, son lentos, no tienen las cualidades requeridas o simplemente no sirven para cazar o “son viejos”. La mayor sensibilidad social contra el maltrato animal y la violencia que genera el mundo de la caza se pudo observar con casos tan dramáticos como el de la muerte de la perra Alma, en Chantada. Por ello, NAC reivindica también la creación de una ley estatal de protección animal que cumpla sin trabas su cometido.
Las protectoras y perreras de todas las comunidades autónomas están abarrotadas de animales abandonados, muchos de ellos galgos, podencos y otros perros usados por los cazadores.
Por eso, las adopciones de otros países como Alemania, Holanda, Bélgica, Francia e Italia, entre otros, suponen una gran ayuda, pero son solo una solución pasajera. Lo que se requiere es un cambio en España, para dejar de ser un país de tercera en lo que se refiere a bienestar animal. n
Febrero es un mes especialmente crítico y señalado por coincidir con el fin de la temporada de caza con galgo. Según las protectoras, alrededor de 50.000 perros de esta raza son descartados cada año. A esta cifra habría que añadir podencos, setters, pointers y otros perros utilizados para la caza. Esto es así porque muchos de ellos no son válidos, son lentos, no tienen las cualidades requeridas o simplemente no sirven para cazar o “son viejos”. La mayor sensibilidad social contra el maltrato animal y la violencia que genera el mundo de la caza se pudo observar con casos tan dramáticos como el de la muerte de la perra Alma, en Chantada. Por ello, NAC reivindica también la creación de una ley estatal de protección animal que cumpla sin trabas su cometido.
Las protectoras y perreras de todas las comunidades autónomas están abarrotadas de animales abandonados, muchos de ellos galgos, podencos y otros perros usados por los cazadores.
Por eso, las adopciones de otros países como Alemania, Holanda, Bélgica, Francia e Italia, entre otros, suponen una gran ayuda, pero son solo una solución pasajera. Lo que se requiere es un cambio en España, para dejar de ser un país de tercera en lo que se refiere a bienestar animal. n
