Las fiestas y las verbenas inundaban la geografía gallega cada verano y detrás de ellas se encuentra todo un sector que ha recibido con especial dureza el mazazo que ha supuesto la pandemia del coronavirus. En Vigo las fiestas de Coia fueron la primera gran ausencia de un verano que tampoco contará con otros de sus festejos más señalados como los de Bouzas o San Roque.
Alrededor de 300 orquestas recorrían cada verano las verbenas de Galicia a un ritmo incansable que este verano se ha detenido prácticamente por completo. José Antonio Blas, director gerente de la orquesta París de Noia, ya da la temporada por perdida. "Este verano ya no vemos opción, con los rebrotes la gente no está pensando en ponerse a hacer verbenas", asegura Blas.
"Hasta que haya una vacuna o un medicamento para el coronavirus creo que lo vamos a tener bastante complicado, porque el rechazo social y el miedo a los rebrotes lo hace todo bastante complicado", afirma Blas, que remarca que aunque existan protocolos que permitirían llegar a realizar actuaciones, la cancelación generalizada de las verbenas cierra las puertas al sector.
La orquesta París de Noia, como muchas otras agrupaciones similares, afronta este verano con un parón absoluto y con sus trabajadores acogidos aun ERTE. Blas recuerda que "hay mucha gente que vive de este sector y no estamos recibiendo ayudas, nos sentimos un poco abandonados".
El sector de la pirotecnia también está viviendo un verano negro. Argimiro Alborés, presidente de la Asociación Gallega de Industrias Pirotécnicas, asegura que "ahora mismo la situación es crítica para el sector". Alborés también es gerente de la empresa familiar Pirotécnica Argimiro Alborés, situada en Nigrán. "Ahora mismo no hay fiestas y la facturación ha bajado entre el 90 y el 95%", afirma Alborés.
Si bien los espectáculos pirotécnicos no tienen por qué generar aglomeraciones en todas las ocasiones, Alborés señala que la cancelación de las fiestas ha paralizado al sector. "Ahora mismo solo pide algún devoto como sucedió con las fiestas de Coia", indica, que este año mantuvieron algunas bombas de palenque a pesar de prescindir de la mayor parte de las celebraciones, a excepción de las ceremonias religiosas.
Al igual que sucedía con las orquestas, Alborés asegura que todas las empresas gallegas del sector tienen a sus trabajadores bajo un ERTE. "Nosotros no podemos ir abriendo de manera progresiva como sucedió con las cafeterías", destaca Alborés.
Los feriantes son otros de los grandes afectados por la cancelación de las verbenas. Daniel Castaño, de la empresa Iacobus Gestora de Eventos, asegura que "el impacto económico en el sector de los feriantes va a ser incuantificable". Castaño lamenta que la mayoría de ayuntamientos cancelaran todas las fiestas sin tratar de estudiar la situación y valorar posibles protocolos que permitieran eventos diferentes a los de otros años.
"No entendemos desde nuestro sector que se nos deje de lado", asegura Castaño, que remarca la necesidad de contar con algún tipo de ayudas específicas para el sector. "El aforo máximo de las verbenas será de 1.000 personas con lo que muchas empresas no podrían cubrir el desembolso que supone realizar un evento como este", indica Castaño, quien también da la temporada de 2020 por perdida.
Las personas detrás de las fiestas
"El miedo a los rebrotes lo hace todo bastante complicado"
José Antonio Blas es el director gerente de la orquesta París de Noia, una de las más importantes de Galicia, que cada año podía llegar a dar hasta 180 actuaciones, siendo los meses de verano los de mayor número de eventos. Sin embargo este año ya da la temporada por perdida. "El miedo a los rebrotes lo hace todo bastante complicado", asegura Blas.
"Ahora mismo no hay fiestas y la situación es crítica para el sector"
Argimiro Alborés es gerente de la empresa pirotécnica de mismo nombre. Un negocio familiar ubicado en Nigrán que cuenta ya con tres generaciones a su espalda. "Ahora mismo no hay fiestas y la situación es crítica para el sector", indica Alborés, remarcando que en los casos en los que todavía pueden trabajar "cuesta más pedir los permisos y los papeles que lo que nos supone la facturación".
"Hay gente que no se va a poder recuperar después de este parón"
Daniel Castaño, de la empresa Iacobus Gestora de Eventos, se especializa en la organización de mercadillos y recreaciones históricas.
"Hay gente que no se va a poder recuperar después de este parón", asegura Castaño. Además, el feriante apunta que el endurecimiento de los protocolos de seguridad afecta especialmente a los organizadores de mercadillos "solo por incluir animación de calle".
