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Un verano de patrulla sin incendios

Los policías a caballo también estuvieron en Redondela, donde la Policía Nacional cuenta con comisaría.
photo_camera Los policías a caballo también estuvieron en Redondela, donde la Policía Nacional cuenta con comisaría.
La Unidad de la Policía Nacional recorre el rural de Vigo y comarca por séptimo año.

 “Este es el mejor año de todos los que recordamos. Las condiciones meteorológicas y la humedad son las mejores para evitar que se registren incendios forestales. En el más de mes y medio que estamos patrullando los montes del sur de Galicia sólo una vez vimos un conato, en la provincia de Ourense y cuando ya estábamos de regreso a la base”, explica el responsable de la Unidad de Caballería de la Policía Nacional. 


Este es el séptimo año que participan en el operativo contra los incendios forestales, en los que también interviene la guardia Civil y las Fuerzas Armadas a través del operativo “Centinela gallego” iniciada el 15 de este mes. La visión del terreno de estos agentes, que en su gran mayoría repiten labores de vigilancia en el sur de la provincia, es "mucho mejor gracias a la experiencia de otros años, por lo que  nuestra labor es más eficiente, además, aquí siempre contamos con la colaboración de los ciudadanos, que nos ayudan mucho en nuestra labor preventiva de los incendios", asegura el responsable del grupo. 


Patrullan las zonas rurales de las ciudades de Vigo y Pontevedra, además de Redondela, Marín y Villagarcía, incidiendo en el Camino Portugués, donde su presencia "es muy bien recibida por los peregrinos que sabiendo que estamos vigilando se sienten más seguros", comentan.


Los seis agentes de la Unidad de la Caballería de la Policía Nacional llevan ya más de mes y medio de campaña y su labor se ha centrado, ante la ausencia de incendios, “en las labores preventivas de seguridad ciudadana y en el Camino de Santiago”, donde este fin de semana se les pudo encontrar a la salida de Vigo.  Una jornada normal de trabajo puede suponer recorrer una distancia que oscila entre los 30 y los 40 kilómetros por monte. "Los caballos están entrenados para todo tipo de terreno, pero pensando ya en estos meses en Galicia hacemos salidas por lugares de monte y arbolado", explica el responsable del grupo. Algunas de las cabalgaduras que se encuentran patrullando este año "ya vinieron en otras campañas, lo que también es bueno ya que están más habituadas".


Una de las cosas que han notado que aumentó con respecto a otros años es el número de peregrinos, que según comentan mientras recorren el Camino de la Costa a su paso por Saiáns "son muy numerosos, sobre todo por la mañana. Se nota que el Xacobeo está a la vuelta de la esquina". Este tipo de caminantes lo que más preguntan "es lo que falta hasta su destino, si van bien, porque a veces se pierden y, en algunos casos, que se les ayude y traslade porque con el esfuerzo se encuentran mal". Eso sí, lo que casi nunca falta es la foto de rigor con los agentes y sus caballos para compartir en las redes sociales. 

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