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El vandalismo da una sinfonía abigarrada en calles y plazas

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 La plaza de Portugal y todo su entorno es la auténtica "zona cero", aseguran los vecinos que llevan años protestando

 Teresa Romero se ha cansado de repetir que las calles del entorno de la plaza Portugal están abandonadas. "Están de pena. Llevo doce años pidiéndolo y jamás han venido a limpiar la fachadas, pero no es sólo eso, es que las escaleras que abrieron a Uruguay ya están pintadas y con destrozos. Llamamos al 010, presente siete denuncias al Concello y nos dijeron que en una semana iban a reponerlos, pero no han hecho nada", explica esta vecina, muy combativa. En su opinión, en esta zona no hay otra solución que poner cámaras para acabar con la ruina. De hecho, el único edificio que se salva es del 7, de Churuca con Gravina: una empresa tiene contratada la limpieza de pintadas "y así está bien, pero es el único", señala.
No es el único caso, aunque sí el más llamativo en el centro urbano. En Coia se suceden edificios pintados en sus bajos a lo largo de la avenida Castelao. Los vecinos advierten de que la mayoría de las comunidades de propietarios se acaban cansando, según explican desde la asociación Cristo de la Victoria. "Arreglan y pintan los bajos y a los dos días ya están pintados, y el Concello en esto no entra", explica. En todo caso, Cristo de la Victoria reconoce que le preocupa más el estado de las aceras y los interiores. "Hay una dejadez enorme", señala. En la calle Príncipe, el gerente de su Centro Abierto, Enrique Núñez, reconoce que cada vez que aparecen pintadas y carteles "duran mucho tiempo". En todo caso, en las tiendas es cada propietario el que tiene que hacerse cargo de eliminar las pintadas y si se trata de un edificio abandonado, entonces duran meses, "normalmente hasta Navidad, que entonces hay alguna campaña de limpieza", explica. 

EL MURAL RECUPERADO

El mural de Carmen Krukenberg, en Rosalía de Castro, ha sido varias veces vandalizado y recuperado. De momento, aguanta.

EN PRÍNCIPE, DEL COMERCIO

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La calle Príncipe, pese a ser la más comercial y transitada, tampoco se libra: cada tienda tiene que ocuparse de sus pintadas.

EN COIA, COSA DE VECINOS

Los vecinos de los edificios de la avenida Castelao y los interiores parece que tiran la toalla: arreglan los bajos y aparecen pintados.

ESCALERAS RECIÉN LIMPIADAS

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Las escaleras de la Plaza de Portugal sufrieron las pintadas pero ya lucen limpias.

UN EDIFICIO HISTÓRICO

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La plaza de Portugal es la zona cero. El edificio histórico de Castro se encuentra irreconocible.

URUGUAY, SIN ESPACIO LIBRE

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La calle Uruguay, con Churruca y Gravina, se encuentran "decoradas" en su totalidad.

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