Abordaba a sus víctimas, todas ellas mujeres de edad avanzada, a la entrada del portal de sus viviendas. Con la excusa, algunas veces, de ayudar con las bolsas de la compra y otra de entrar en el edificio para visitar a alguien, las asaltaba una vez en el portal con extrema violencia para llevarse cadenas, relojes o carteras y salir huyendo. La ladrona se sentó ayer en el banquillo en la Audiencia en Vigo. Se enfrentaba a una pena total de 25 años, pero un acuerdo con la Fiscalía, al reconocer los hechos, le permitió una rebaja a 13 años y dos meses además del pago de una multa de 1.080 euros.
En una vista por conformidad y posterior sentencia “in voce”, Rosa G.G. fue condenada por cuatro delitos de robo con violencia, uno más en tentativa, otro de hurto agravado y uno más de estafa.
El rosario delictivo tuvo lugar entre el 4 y el 16 de septiembre de 2020. A una de sus víctimas le quitó la tarjeta y se gastó toda la pensión más los ahorros.
Por los daños morales tendrá que pagar 2.000 euros a tres de las perjudicadas, una de ellas ya fallecida por lo que irá a sus herederos. Además, tendrá que devolver a los establecimientos de empeño el dinero recibido por las joyas sustraídas y que fueron devueltas a sus propietarios y al banco la cantidad que entregó a una de las perjudicadas.
Durante sus asaltos, utilizaba el método del tirón, llegando a causar lesiones a las personas de edad avanzada a las que les quitaba a la fuerza la cadena o el reloj. En una de las ocasiones llegó a ser sorprendida por unos vecinos por lo que tuvo que huir a la carrera.
En total, fueron cinco los robos violentos que comentó en apenas dos semanas, en distintos edificios de la ciudad, poniendo en marcha un método que durante el año pasado se puso en práctica en otros puntos de España, con resultados graves en algunos casos para las víctimas.
La mujer, que se encuentra en prisión provisional desde su detención, continuará en A Lama.
