El cuarteto Vigo 430 inauguró su ciclo de cuatro conciertos los jueves de agosto en el yacimiento romano de O Vao
Los nuevos tiempos también se adaptaron a la dinamización de Mirambell. Las escenificaciones de gladiadores, el mercado de esclavos o los banquetes en la domus dieron paso a un recital de música a cargo del cuarteto de cuerda de la orquesta Vigo 430 con menos contacto físico. La contextualización se mantuvo y la actores ataviados a al moda romana recibieron a “los huéspedes en su casa”.
Con distanciamiento social, mascarillas y situados en sillas, solo se permitió la entrada a 120, los primeros en llegar. Los últimos tuvieron que conformarse con seguir el espectáculo desde fuera del perímetro. Después de que el alcalde diera al bienvenida a los asistentes, un técnico hizo una breve introducción histórica para contextualizar el entorno, mientras los actores se lucían, paseando entre las ruinas.
A continuación comenzó el concierto, con una explicación previa de los temas que tocaron: “Cuarteto en si bemol mayor”, de Haynd y número 12 en fa maior, “Americano”, de Antonin Dvorák. El público, integrando por vigueses y turistas, valoró la localización del concierto al aire libre y la difusión de un lugar emblemático como Mirambell, que esta semana también comenzó su oferta de visitas guiadas. Entre las peculiaridades de la villa romana, toda una “explotación” familiar basada en parte en las salinas de Toralla destaca el sistema de calefacción de la casa bajo el suelo.
El próximo jueves la audición volverá a correr a cargo del cuarteto Vigo 430. Dará el testigo a otra agrupación sinfónica de la ciudad, la Orquesta Clásica de Vigo, que en versión reducida acudirá al yacimiento para ofrecer dos conciertos los últimos jueves de mes.
Dentro del mismo programa de Patrimonio Histórico, hoy comienzan las actuaciones en Villa Solita, que continuarán los viernes de agosto y los dos primeros de septiembre.
Con distanciamiento social, mascarillas y situados en sillas, solo se permitió la entrada a 120, los primeros en llegar. Los últimos tuvieron que conformarse con seguir el espectáculo desde fuera del perímetro. Después de que el alcalde diera al bienvenida a los asistentes, un técnico hizo una breve introducción histórica para contextualizar el entorno, mientras los actores se lucían, paseando entre las ruinas.
A continuación comenzó el concierto, con una explicación previa de los temas que tocaron: “Cuarteto en si bemol mayor”, de Haynd y número 12 en fa maior, “Americano”, de Antonin Dvorák. El público, integrando por vigueses y turistas, valoró la localización del concierto al aire libre y la difusión de un lugar emblemático como Mirambell, que esta semana también comenzó su oferta de visitas guiadas. Entre las peculiaridades de la villa romana, toda una “explotación” familiar basada en parte en las salinas de Toralla destaca el sistema de calefacción de la casa bajo el suelo.
El próximo jueves la audición volverá a correr a cargo del cuarteto Vigo 430. Dará el testigo a otra agrupación sinfónica de la ciudad, la Orquesta Clásica de Vigo, que en versión reducida acudirá al yacimiento para ofrecer dos conciertos los últimos jueves de mes.
Dentro del mismo programa de Patrimonio Histórico, hoy comienzan las actuaciones en Villa Solita, que continuarán los viernes de agosto y los dos primeros de septiembre.
