Los datos de exportaciones en Galicia del primer semestre dejan un panorama poco halagüeño.
¿Qué ocurre?
Sí, es cierto. Arrastramos caídas desde los dos últimos meses del año pasado. Por aquel entonces ya se preveía una desaceleración por el principal problema que hay en Galicia, que es la alta concentración de las exportaciones en Europa que representa cerca de un 80% y más del 55% se concentran solo en cinco países.
Cinco países que tienen problemas.
Efectivamente. Los principales mercados gallegos en el exterior son Francia y Alemania, que están a punto de entrar en recesión, Italia, que ya lo está desde principios de año, Reino Unido con toda la incertidumbre que arrastra el Brexit y Portugal que está empezando a caer. Por otro lado, tenemos otro problema junto con la elevada dependencia de Europa y es que Galicia no está presente en los mercados emergentes o si lo está es de una manera anecdótica.
¿Cuáles son esos mercados con oportunidades de negocio?
Estados Unidos, Japón, Corea o China son algunos de ellos y la presencia gallega en ellos es mínima.
¿Tiene alguna estrategia el ICEX para capear esta crisis exportadora?
Desde la Secretaría de Estado de Comercio tenemos en marcha una estrategia de internacionalización de la economía española que abarca el periodo 2017-2027 y que no va a cambiar independientemente del gobierno que esté. En esta agenda se marcan las oportunidades de negocio para las empresas. En Asia hay cuatro mercados principales que serían China, Japón, Corea del Sur e India; En Europa, Rusia y Turquía; Marruecos y Sudáfrica en el continente africano y Canadá, EE UU, México y Brasil en América. Son 12 países claves que se muestran seguros desde el punto de vista jurídico y que ofrecen oportunidades de negocio para sectores muy diversos como el agroalimentario, aeronáutico, automoción, infraestructuras, pesca o el sector TIC. Hay que apostar por estos países sí o sí.
¿No resulta complicado para las pymes abarcar estos mercados?
Ese es otro problema que vemos en Galicia, que la mayor parte del entramado empresarial está formado por pymes y micropymes y para exportar se necesita tener un tamaño adecuado. De ahí la necesidad de retomar la figura de los consorcios empresariales. Ir de manera agrupada es la salida. En septiembre empezaremos un ciclo de reuniones con las asociaciones empresariales, clústers y expertos de las universidades gallegas en comercio internacionalización para atajar la situación. Vamos a hablar con todos los sectores y trabajar de manera interna con la empresa a través de la formación, la digitalización y la electrónica porque es el futuro.
¿Cuál es el sector que mejorcomportamiento presenta?
El naval está creciendo mucho y es el que mejores resultados aporta e irá a más en un futuro. Es un sector que venía de una época muy mala y ahora se están viendo los resultados de los contratos. El naval gallego y de Vigo sobre todo es un ejemplo de claro de lo que hay que hacer, diversificar y salir al exterior. La automoción es, en estos momentos, el que presenta peores datos pero es cíclico. La exportación repuntará con el inicio de la producción de nuevos coches en PSA Vigo.
¿Es precipitado hablar de recesión económica en Galicia?
La situación es mala, eso es así. Yo soy experto en comercio exterior y en mi materia lo que puede decir es que este año no habrá crecimiento y lo que pasa a nivel nacional y europeo acaba por llegar a nivel regional y si tenemos en cuenta la alta dependencia que tiene Galicia de la UE, el problema se agrava.
Cuando usted llegó al ICEX en Galicia, la comunidad gallega batía récord de exportaciones.
Y de eso hace solo dos años.
Sí, la situación ha cambiado mucho en poco tiempo debido al problema del déficit estructural y el crecimiento de la dependencia europea. Por aquel entonces la UE estaba creciendo y nos iba de maravilla, pero ahora han llegado los problemas, hay una desaceleración de la economía a nivel europea que está repercutiendo en España, donde las exportaciones crecen muy poco, aunque crecen, y en Galicia caen un 15%.
Y la comunidad gallega apenas recibe inversiones extranjeras.
Siempre digo que Galicia es un campo de oportunidades para invertir por su buenas comunicaciones y sectores muy pujantes pero se tendría que promocionar mucho más la existencia de esta zona y sus servicios, potenciar por ejemplo su privilegiada ubicación como salida marítima hacia el continente americano. Cuando hablo de inversiones extranjeras me refiero a inversión de calidad, de empresas que vengan a implantarse, para quedarse y generar puestos de trabajo y riqueza y no a especular.
Sí, es cierto. Arrastramos caídas desde los dos últimos meses del año pasado. Por aquel entonces ya se preveía una desaceleración por el principal problema que hay en Galicia, que es la alta concentración de las exportaciones en Europa que representa cerca de un 80% y más del 55% se concentran solo en cinco países.
Cinco países que tienen problemas.
Efectivamente. Los principales mercados gallegos en el exterior son Francia y Alemania, que están a punto de entrar en recesión, Italia, que ya lo está desde principios de año, Reino Unido con toda la incertidumbre que arrastra el Brexit y Portugal que está empezando a caer. Por otro lado, tenemos otro problema junto con la elevada dependencia de Europa y es que Galicia no está presente en los mercados emergentes o si lo está es de una manera anecdótica.
¿Cuáles son esos mercados con oportunidades de negocio?
Estados Unidos, Japón, Corea o China son algunos de ellos y la presencia gallega en ellos es mínima.
¿Tiene alguna estrategia el ICEX para capear esta crisis exportadora?
Desde la Secretaría de Estado de Comercio tenemos en marcha una estrategia de internacionalización de la economía española que abarca el periodo 2017-2027 y que no va a cambiar independientemente del gobierno que esté. En esta agenda se marcan las oportunidades de negocio para las empresas. En Asia hay cuatro mercados principales que serían China, Japón, Corea del Sur e India; En Europa, Rusia y Turquía; Marruecos y Sudáfrica en el continente africano y Canadá, EE UU, México y Brasil en América. Son 12 países claves que se muestran seguros desde el punto de vista jurídico y que ofrecen oportunidades de negocio para sectores muy diversos como el agroalimentario, aeronáutico, automoción, infraestructuras, pesca o el sector TIC. Hay que apostar por estos países sí o sí.
¿No resulta complicado para las pymes abarcar estos mercados?
Ese es otro problema que vemos en Galicia, que la mayor parte del entramado empresarial está formado por pymes y micropymes y para exportar se necesita tener un tamaño adecuado. De ahí la necesidad de retomar la figura de los consorcios empresariales. Ir de manera agrupada es la salida. En septiembre empezaremos un ciclo de reuniones con las asociaciones empresariales, clústers y expertos de las universidades gallegas en comercio internacionalización para atajar la situación. Vamos a hablar con todos los sectores y trabajar de manera interna con la empresa a través de la formación, la digitalización y la electrónica porque es el futuro.
¿Cuál es el sector que mejorcomportamiento presenta?
El naval está creciendo mucho y es el que mejores resultados aporta e irá a más en un futuro. Es un sector que venía de una época muy mala y ahora se están viendo los resultados de los contratos. El naval gallego y de Vigo sobre todo es un ejemplo de claro de lo que hay que hacer, diversificar y salir al exterior. La automoción es, en estos momentos, el que presenta peores datos pero es cíclico. La exportación repuntará con el inicio de la producción de nuevos coches en PSA Vigo.
¿Es precipitado hablar de recesión económica en Galicia?
La situación es mala, eso es así. Yo soy experto en comercio exterior y en mi materia lo que puede decir es que este año no habrá crecimiento y lo que pasa a nivel nacional y europeo acaba por llegar a nivel regional y si tenemos en cuenta la alta dependencia que tiene Galicia de la UE, el problema se agrava.
Cuando usted llegó al ICEX en Galicia, la comunidad gallega batía récord de exportaciones.
Y de eso hace solo dos años.
Sí, la situación ha cambiado mucho en poco tiempo debido al problema del déficit estructural y el crecimiento de la dependencia europea. Por aquel entonces la UE estaba creciendo y nos iba de maravilla, pero ahora han llegado los problemas, hay una desaceleración de la economía a nivel europea que está repercutiendo en España, donde las exportaciones crecen muy poco, aunque crecen, y en Galicia caen un 15%.
Y la comunidad gallega apenas recibe inversiones extranjeras.
Siempre digo que Galicia es un campo de oportunidades para invertir por su buenas comunicaciones y sectores muy pujantes pero se tendría que promocionar mucho más la existencia de esta zona y sus servicios, potenciar por ejemplo su privilegiada ubicación como salida marítima hacia el continente americano. Cuando hablo de inversiones extranjeras me refiero a inversión de calidad, de empresas que vengan a implantarse, para quedarse y generar puestos de trabajo y riqueza y no a especular.
