Robótica, skate, cómic o surf, nuevas extraescolares en Vigo

Con bloques de construcción, un chip informático y conocimientos básicos de programación, los alumnos que escogen Robótica aprenden a hacer pequeñas máquinas que pueden controlar a través de una tablet o un teléfono móvil. En la foto, un grupo del Fleming con sus creaciones.
photo_camera Con bloques de construcción, un chip informático y conocimientos básicos de programación, los alumnos que escogen Robótica aprenden a hacer pequeñas máquinas que pueden controlar a través de una tablet o un teléfono móvil. En la foto, un grupo del Fleming con sus creaciones.
Novedosas actividades se abren paso en los colegios de la ciudad después de las clases

Al igual que las formación curricular de los colegios, las actividades extraescolares –organizadas generalmente por las Anpas en los colegios públicos– han sufrido un proceso de modernización vertiginoso. Aunque las actividades más tradicionales y populares (como puede ser el fútbol o el baile gallego) continúan en la oferta de la mayoría de centros, los intereses de los más pequeños de la casa han ayudado a repensar muchas de las actividades y añadir nuevas a los catálogos.

Uno de los casos más claros es el skate. Lo que hace poco más de una década era visto como un mero ‘hobby’ de una de las tribus urbanas de la época es ahora un deporte olímpico y los alumnos se interesan cada vez más por él. Es por eso que Anpas como la del CEIP Doutor Fleming ya la ofrecen en sus centros, con un éxito más que notable. Así lo confirma Cristina, presidenta de la mencionada Anpa, que apunta que se alcanzó fácilmente el tope de plazas para la actividad: 15. Aunque la demanda es algo mayor, la formación requiere un ratio de un monitor por cada 7 alumnos para que los niños puedan aprovechar realmente la sesión semanal de la que disfrutan.

Una de las nuevas actividades estrella en los colegios vigueses es la robótica. En este mismo centro también completan las plazas cada año. Orientada a estudiantes de Primaria, en estas clases aprenden a construir pequeños robots con piezas de construcción normales y corrientes a las que añaden placas informáticas y baterías que luego, gracias a los conocimientos básicos de programación que aprenden, les permiten controlarlos con sencillez a través de una tablet o un móvil.

Triunfa mucho también, como señala José Martínez, responsable de actividades paraescolares del Colegio Apóstol Santiago, el surf. “Los alumnos querían hacer una actividad acuática y buscamos un convenio”. Así, un día a la semana, los responsables de la escuela de surf los llevan hasta la playa de Patos desde el propio centro y los llevan de vuelta allí. “En primavera tiene muchísimo tirón”, apunta Martínez.

Cómic, breakdance, oratoria… Las nuevas actividades extraescolares tienen muchas ramificaciones y tanto colegios como Anpas tienen muy en cuenta los intereses de los más pequeños para seguir ofreciendo la formación extracurricular que se merecen.

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