La Autoridad Portuaria ha decidido retrasar la publicación del Plan Director de Infraestructuras, el documento clave que marca el desarrollo de las actuaciones a desarrollar durante al menos los próximos diez años, ante la perspectiva de incluir entre sus propuestas la ampliación de su territorio a costa de Vulcano, astillero en liquidación y con escasas perspectivas de que pueda ser reflotado.
Entre otros motivos, porque la dirección de la factoría naval ni siquiera quiso optar a ampliar su concesión, que caduca en un plazo de menos de siete años, lo que hace casi por completo inviable que otra empresa se haga cargo de las instalaciones: un plazo tan corto no resultaría rentable, debido a las inversiones a realizar para poner en marcha de nuevo el negocio, que necesitaría un cambio radical para ponerse al día.
La única petición que se cursó desde Vulcano, y fue aceptada por el organismo portuario, fue incluir el desguace entre las actividades a desarrollar y permitir el atraque en las aguas anexas al astillero, dos propuestas validadas de cara a dar mayor capacidad de aguante a la firma.
En estas circunstancias, la Autoridad Portuaria ha decidido tomar nota de las decisiones del administrador concursal de la liquidación iniciada en el Juzgado Mercantil de Vigo, el número 3 de la provincia, solicitud voluntaria de liquidación de la empresa y con ello de toda la actividad, lo que supondrá el cierre definitivo del astillero.
La Autoridad Portuaria es la propietaria de los terrenos, que recuperaría d para la actividad marítima. El Puerto daría todas las facilidades a los inversiones que quieran "resucitar" Vulcano. Si no fuera así, el Puerto asumiría el espacio físico de la concesión recuperada para otro fines, en especial la ampliación de la terminal de Guixar para contenedores, como figura en el Plan Estratégico. Es la primera opción, y de ahí que la decisión de retrasar el Plan Director de Infraestructuras de cara a poder incluir dicho espacio en las previsiones.
Aunque Guixar está lejos del umbral de la saturación en contenedores-puede alcanzar los 350.000 y ahora está en unos 200.000 al año-, Vigo podría mover medio millón de depósitos al año, lo que exigiría disponer de una nueva terminal. El Puerto lo tiene en cuenta, siempre no haya una empresa que asuma el astillero.
Pros y contra del final del astillero y la terminal
Aunque el proceso de liquidación no ha sido una sorpresa para nadie, ya que se daba por seguro tras la entrega del ferri, todavía los trabajadores esperan que haya alguna posibilidad de continuar con la factoría naval ahora que el sector apunta una mejoría. También la patronal, en este caso la Feria Internacional de la Industria Naval, Navalia, espera que haya alguna posibilidad de continuar adelante al tratarse de un punto estratégico dentro de la Ría de Vigo, que dispone de unas magníficas instalaciones para que la actividad tenga continuidad, teniendo en cuenta, además, que siempre ha tenido personal altamente cualificado.
Comisiones Obreras espera que el procedimiento de liquidación sea "ágil y rápido, en beneficio de los trabajadores"y seguirá presionando a la Xunta para la búsqueda de un inversor que pueda rescatar la actividad industrial del centenario astillero. La Autoridad Portuaria sin embargo lo tiene claro: si Vulcano finalmente desaparece, como todo apunta ahora, el Puerto se hará automáticamente con la concesión, que caduca en siete años, "así que es momento para tomar decisiones", explicaron. El Puerto considera que asumiendo una tasa de crecimiento moderada, Guixar se saturaría en diez años, y si el incremento es más vigoroso sería antes, en apenas seis.
