La producción en PSA Vigo avanza con rapidez pero sobre seguro, incorporando desde al lunes a cerca de 1.600 trabajadores pertenecientes al turno de noche. El regreso de esta parte de la plantilla dos semanas después de la reapertura de la planta de Balaídos se suma al turno de mañana, formado por otro grupo de 1.600 trabajadores tanto en los talleres de aprovisionamiento que regresó el lunes 11 como el personal de las dos líneas de montaje que se reincorporó dos días más tarde. Así, la planta de PSA Vigo alcanza ya una producción diaria que ronda las 1.300 unidades de las 2.300 de capacidad máxima de la fábrica.
“La toma de decisiones de incorporar los distintos turnos se realiza en función al avance de la desescalada y la situación en el mercado”, trasladaron ayer desde la dirección de PSA Vigo, destacando que “vamos algo más rápido de lo que esperábamos en un principio” gracias a la reactivación paulatina de los mercados, la buena aceptación de los modelos producidos en Balaídos y contar con una significativa cartera de pedidos.
La incorporación del turno de noche se produjo con total normalidad, como ya ocurrió con el turno de mañana, con registro de temperatura a la entrada de las instalaciones y siguiendo un elaborado protocolo de prevención. El siguiente paso será el regreso de los trabajadores del turno de tarde, previsto para las próximas semanas.
En este contexto, la dirección de PSA mantiene su compromiso por recuperar en lo posible la normalidad en la factoría viguesa, trasladó ayer a la plantilla las fechas de vacaciones en el periodo estival: tres semanas entre el 27 de julio y el 16 de agosto para los turnos A, B, Noche y Central –ambas fechas incluidas–, mientras que los trabajadores del cuarto turno cuentan con un calendario teórico donde, a los cuatro días fijados en diciembre, se sumarían vacaciones en agosto del 27 de julio al 14 de agosto, coincidiendo con el resto de plantilla a fin de complementar la capacidad productiva en el mes de agosto.
