El fiscal vigués de Seguridad Vial remitió ayer a Guardia Civil las instrucción de la DGT para los vehículos de movilidad personal
El usuario de un patinete eléctrico cuya potencia sea similar a la de un ciclomotor podría enfrentarse a un delito contra la Seguridad Vial si comete infracciones con este vehículo de movilidad personal. El fiscal vigués delegado de Tráfico de Galicia, Carlos Gil, remitió ayer en la reunión celebrada con la Guardia Civil y los fiscales provinciales la instrucción de mayo de la DGT respecto a estos vehículos. En dicha instrucción se especifica, a la espera de un reglamento definitivo, que los patinetes eléctricos mencionados deberán llevar seguro, matrícula y sus conductores un permiso o licencia similar al del ciclomotor.
Este fue uno de los temas abordados en la reunión con los responsables de la Guardia Civil de Tráfico y los fiscales y que causa especial preocupación en la Fiscalía. Todavía muy reciente, según fuentes fiscales, la implantación de este tipo de medios de transporte ha llevado al Ministerio Público a plantearse un posible encaje penal en las infracciones, como por ejemplo la ingesta de alcohol y drogas o la falta de seguro obligatorio. Finalmente, el encuentro sirvió para coordinar actuaciones siguiendo las directrices de la DGT principalmente en los patinetes eléctricos que son “auténticos ciclomotores disfrazados de patinete”, tal y como aseguraba hace unos días el fiscal Carlos Gil.
Para el delegado de Seguridad Vial en Galicia, se trataría de un “fraude” ya que por potencia y velocidad, algunos pueden llegar a alcanzar los 70 kilómetros por hora, son comparables a un ciclomotor.
Con este encuentro se abordó el asunto a nivel interurbano, con las unidades de Tráfico de la Guardia Civil, si bien quedaría todavía pendiente la circulación d por vías urbanas, algo que, tal y como explicó la Fiscalía, es una materia que depende de las policías locales y que requiere una ordenanza municipal.