El oficio policial sobre unas declaraciones recabadas en 2005 a testigos fundamentales de la investigación sobre la desaparición y posterior hallazgo del cadáver de la joven Déborah Fernández ha documentado la existencia de falso testimonio ante el juzgado. A pesar de que dicho documento fue remitido a las partes el pasado día 5 de enero todavía no ha habido ninguna resolución judicial al respecto, lo que ha llevado al equipo legal de la familia de la joven a pedir por escrito un impulso de la causa por parte de la titular de Instrucción 2 de Tui y de la Fiscalía.
En dicho escrito, que fue presentado ayer ante el juzgado, los abogados formulan también su más “enérgica protesta” por la falta de agilidad procesal ya que el juzgado tardó 34 días en atender la petición para oficiar a la Policía Nacional la remisión de la documental que obraba en su poder.
El contenido del atestado especifica una serie de conversaciones con la Policía de un testigo en concreto que no se corresponderían con el testimonio aportado en sede judicial cuando fue citado a declarar.
Estas revelaciones salieron además de los lejagos que la Policía tiene en su poder y que siguen si entregarse al juzgado. En ste sentido, los abogados reiteran la petición hasta ahora denegada para que se le requiera a la Policía y remita al juzgado cuanta documentación haya en su poder.
Las ocho cajas con documentación se pidieron directamente tanto a la Comisaría de Vigo como al propio equipo investigador, sin obtener respuesta. Pese a todo, recuerda el escrito de los abogados, que son varios ya los casos en los que accediendo a sus peticiones se recibieron documentos de gran interés para la investigación, como el último atestado. De ahí, que los letrados consideren “inexplicable” que no se exija la remisión de los documentos para ser revisados por la jueza, el Ministerio Fiscal y por el equipo legal que representa a la familia.
Por el momento, la causa parece estar paralizada en el juzgado.
