La Cofradía de Pesca propone a Portos reconstruir el edificio que se vino abajo para venta directa y centro de control
nnn La Cofradía de Pesca de Vigo propondrá finalmente a Portos de Galicia, organismo de la Consellería de Mar, la reconstrucción de la parte del edificio donde se encontraban la lonja de Canido y su anexo, que se vino abajo de forma inesperada el pasado mes de febrero, aunque con otros fines distintos. No sería un local para subastas, sino que se trataría de aprovechar la oportunidad para poner en marcha un novedoso punto de venta directa de pescado enfocado a clientes minoristas y restaurantes y un centro de expedición de los productos pesqueros. Recientemente, Portos allanó el espacio donde estaba el edifico, ahora utilizado para aparcamiento.
Así lo explicó Iago Soto, patrón mayor de la Cofradía viguesa, quien en todo caso insistió en que reclamarán que se reconstruya el inmueble caído y reconoció que era la ocasión para dar un giro a la actividad. “Estamos de acuerdo en que el uso como lonja tradicional donde van a comprar los intermediarios como en cualquier otra lonja, ya no es posible, porque todo está centralizado en O Berbés. Tenemos un mercado de referencia, en este caso Canido, donde nominalmente vendemos la pesca, pero en realidad está centralizada en Vigo”, esa es la realidad.
Reconoció el patrón mayor que a día de hoy hay muchos intereses "que prefieren que no estemos allí, como el Club Marítimo o la pesca deportiva", aunque reconoció que están dispuestos a tolerar los usos actuales e insistió en su propuesta. "Queremos que se reconstruya el edificio, ya no como lonja, pero sí para seguir usando para descarga, control y preparación de lotes, no tenemos otro sitio para ordenar las capturas".
Iago Soto advirtió de que hasta que se vino abajo la lonja ya se estaba haciendo la venta directa y ahora se iría más allá, de forma organizada, aprovechando la oportunidad que supone la obra a realizar.
"No pretendemos tanto que vengan allí los compradores de pescado, para público en general o restaurantes, sino sobre todo que sea centro de control y expedición y venta directa", señaló como el nuevo uso del edificio.
La pesca artesanal en el puerto de Vigo mueve alrededor de 70 toneladas al año de productos de alta calidad. Y al alza. Para la Cofradía de Pesca resulta inviable disponer de un centro de control y expedición en O Berbés, ya que supondría unos 150.000 euros. "Vigo es para la pesca industrial", zanja Soto, quien mantiene que están dispuestos a ceder y colaborar con quien haga falta. "Canido es un puerto pesquero pero no sólo, es más, queremos colaborar para que no sea de uso privado sino abierto al público", señaló.
La Cofradía cuenta con 150 socios. Una docena de embarcaciones emplean el puerto de Canido prácticamente todo el ano y durante la campaña de marisqueo en el banco de Toralla llega a duplicarse esta cifra debido a los barcos procedentes de otros puertos de la Ría que van a descargar. n
Así lo explicó Iago Soto, patrón mayor de la Cofradía viguesa, quien en todo caso insistió en que reclamarán que se reconstruya el inmueble caído y reconoció que era la ocasión para dar un giro a la actividad. “Estamos de acuerdo en que el uso como lonja tradicional donde van a comprar los intermediarios como en cualquier otra lonja, ya no es posible, porque todo está centralizado en O Berbés. Tenemos un mercado de referencia, en este caso Canido, donde nominalmente vendemos la pesca, pero en realidad está centralizada en Vigo”, esa es la realidad.
Reconoció el patrón mayor que a día de hoy hay muchos intereses "que prefieren que no estemos allí, como el Club Marítimo o la pesca deportiva", aunque reconoció que están dispuestos a tolerar los usos actuales e insistió en su propuesta. "Queremos que se reconstruya el edificio, ya no como lonja, pero sí para seguir usando para descarga, control y preparación de lotes, no tenemos otro sitio para ordenar las capturas".
Iago Soto advirtió de que hasta que se vino abajo la lonja ya se estaba haciendo la venta directa y ahora se iría más allá, de forma organizada, aprovechando la oportunidad que supone la obra a realizar.
"No pretendemos tanto que vengan allí los compradores de pescado, para público en general o restaurantes, sino sobre todo que sea centro de control y expedición y venta directa", señaló como el nuevo uso del edificio.
La pesca artesanal en el puerto de Vigo mueve alrededor de 70 toneladas al año de productos de alta calidad. Y al alza. Para la Cofradía de Pesca resulta inviable disponer de un centro de control y expedición en O Berbés, ya que supondría unos 150.000 euros. "Vigo es para la pesca industrial", zanja Soto, quien mantiene que están dispuestos a ceder y colaborar con quien haga falta. "Canido es un puerto pesquero pero no sólo, es más, queremos colaborar para que no sea de uso privado sino abierto al público", señaló.
La Cofradía cuenta con 150 socios. Una docena de embarcaciones emplean el puerto de Canido prácticamente todo el ano y durante la campaña de marisqueo en el banco de Toralla llega a duplicarse esta cifra debido a los barcos procedentes de otros puertos de la Ría que van a descargar. n
