La reforma integral de la avenida de Madrid para que deje de ser el tramo final de la autovía A-55 y se convierta de nuevo en la entrada principal a la ciudad continúa sin estar madura y la inestabilidad política no juega a favor.
Han pasado más de tres años desde la firma del acuerdo entre el Ministerio de Fomento, entonces con Ana Pastor, y el Concello de Vigo, pero apenas se ha avanzado algo la tramitación.
Según informó a este diario un portavoz autorizado de Fomento, el convenio de colaboración con el Concello de Vigo para adecuar y mejorar la avenida de Madrid está a día como hace un año o dos: en la respuesta oficial, sigue "pendiente y ultimándose para la firma de una Adenda para que el Ministerio de Fomento satisfaga el coste de las actuaciones que prevé el proyecto de trazado", que supone dos tercios de un total de 13,48 millones de euros. El otro tercio lo aporta el ayuntamiento. El convenio se firmó en junio de 2013 y nada se ha movido en apariencia, si bien desde el Concello no hay preocupación.
Por otra parte, con respecto al proyecto de trazado de las obras de mejora y actuaciones complementarias de carácter urbano, desde Fomento se señaló que también está en fase de redacción. "Se debe aprobar provisionalmente para someterlo a información pública", indicaron en el Ministerio, que es la misma respuesta que dio el ministerio hace dos años cuando fue preguntado al respecto.
La nueva convocatoria electoral no va a facilitar que el proyecto, que ya ha conocido tres ministros de Fomento, avance. El proyecto contempla incluir al menos dos rotondas y suprimir las vallas para que desde el Seminario sea una gran avenida urbana de entrada.
