Un total de 16 tramos de carreteras de titularidad autonómica de Vigo y su área se someterán a medidas correctoras para frenar la contaminación acústica. La Consellería de Infraestructuras publicó ayer en el DOG la resolución de la aprobación del expediente de información pública del plan previsto para poner en marcha en dichas vías y en el que invertirá 8,19 millones de euros.
En los casi 25 kilómetros de la provincia se incluyen tramos en la VG-20 en el enlace a Nigrán, la conexión entre Rande y Cangas por la AP-9, la PO 324 en el puente del Lagares, Vigo-Ramallosa por sa entre la PO-325 y la PO 552, así como en enlace entre Tui y la A-55 o el de Gondomar y A Ramallosa entre otros.
La tipología de las actuaciones correctoras van encaminadas, según informó ayer la Consellería de Infraestructuras, al calmar el tráfico mediante la limitación de velocidad, la reordenación de sección de la carretera y la eliminación de zonas de adelantamiento, así como la reducción del ruido generado por el pavimento mediante su renovación o el empleo de pavimentos fonoabsorbentes. En el caso de edificios sensibles afectados, como centros educativos, se recoge la mejora del aislamiento de las fachadas. También se propone en algunos casos, la instalación de pantallas acústicas, la regulación semafórica para la creación de ondas verdes y la eliminación de bandas transversales de alerta y la restricción de tráfico a ciertas horas.
Para llevar a cabo este plan se han delimitado las zonas de servidumbre acústica de los grandes ejes viarios de la red autonómica de carreteras de Galicia que se realizó a partir de mapas estratégicos de ruido, lo que ha supuesto una herramienta para evitar que se creen nuevas situaciones de conflicto de estas carreteras, informaron las mismas fuentes.
