El Concello inició las notificaciones a los beneficiarios de las ayudas de emergencia social otorgadas por el departamento municipal de Benestar Social. En esta edición repartirán 1,620 millones de euros entre 1.612 familias. Se recibieron 2.469 solicitudes, de ellas fueron aceptadas el 60 por ciento.
El perfil predominante del solicitante se encuentra entre los 41 y los 50 años, tramo de edad al que correspondió una asignación total de 500.000 euros. Le sigue la franja que oscila entre los 51 y los 60, a quienes correspondieron con 384.000 euros y la menos numerosa, la de los 31 a los 40 años, que se repartió 317.000 euros.
En esta convocatoria se destinaron a alimentación 435.000 euros para 1.612 familias, 307.000 euros son para cubrir gastos de energía y 878.000 euros para el pago del alquiler o de la cuotas de hipoteca de 1.442 familias. Desde el Concello consideran esta partida como una medida directa para evitar desahucios y así lo manifestó el alcalde Abel Caballero. El regidor hizo hincapié en el esfuerzo de la administración local para asegurar la vivienda y recordó que a esta partida se suman además los 800.000 euros destinados a acciones contra los desahucios por vía de urgencia. Esta cuantía que se puede ampliar ilimitadamente según la demanda y las necesidades que se presenten.
Las cantidades a percibir se asignaron en función a los ingresos del solicitantes y el número de miembros en la unidad de convivencia.
Teniendo en cuenta el derecho a la intimidad de los solicitantes, no aparecerán publicados los nombres de los beneficiarios. Tanto las solicitudes aprobadas como las denegadas podrán identificarse a través del DNI, el NIE o el pasaporte. En caso de los 857 expedientes que no fueron admitidos, se justifica el motivo.
Según la resolución de la convocatoria, se reserva 20.000 euros para atender una segunda resolución si fuera preciso.