Las dos macro estatuas, listas para su instalación

nnn  José Molares acaba de dar los últimos retoques a su obra "Y Siempre Benéfica" y ya sólo le falta el visto bueno de la Autoridad Portuaria para su traslado a la que será su ubicación permanente, al lado de la Estación Marítima. La pieza, que muestra como una viguesa  se hace cargo de un soldado español que acaba de llegar derrotado de la Guerra de Cuba de 1898, está ya terminada, cumpliendo así los plazos del encargo realizado por el Puerto, que prevé que la instalación del grupo escultórico sea cuestión de días. Como es conocido, la Autoridad Portuaria, en concreto su presidente, Enrique López Veiga, se empeñó en colocar una obra de gran tamaño como recordatorio permanente de la recepción que Vigo dio a los soldados que desembarcaron en el puerto. La ciudad se volcó hasta el punto de que el Gobierno de entonces le concedió a la ciudad el título de "Siempre Benéfica", que se añadió al "Fiel, Leal y Valerosa" que había conseguido a principios del mismo siglo XIX tras la Reconquista y que le valió asimismo dejar de ser una villa. Las dimensiones exactas de la pieza son 2,5 de ancho por 2,20 de alto y 1,50 de fondo, montado sobre una base de granito del país que permitirá un fácil acceso a la obra y poder verla desde el mismo plano. Molares también esculpió el Gonzalo de Vigo y el Julio Verne.
La otra escultura de gran porte también está lista para su traslado, aunque la operación final depende de un protocolo para gestionar la licencia entre la Diócesis de Tui-Vigo, el Concello y la Diputación, que es la institución que se ha hecho cargo de la pieza, a través de la Escola de Cainteiría de Poio. Se trata, como ya se ha dicho en varias ocasiones, de la figura del Sagrado Corazón de Jesús que se instalará sobre la torre del campanario de la ermita de A Guía y se convertirá así en un referente local. En este caso se trata de una escultura de 4,85 metros de altura. La pieza está formada por seis unidades de granito ancladas entre sí por púas de piedra y varillas de acero inoxidable para darle mayor consistencia y solidez al conjunto. Tiene un remate en cruz de latón y además de los cinco metros de altura -a los que hay que añadir la torre sobre la que se colocará- tiene 1,40 metros de ancho y 1,35 de envergadura, con un peso aproximado de 6.650 kilos La imagen está lista, pero aún se están dado algunos retoques de última hora aprovechando que todavía no hay fecha definitiva para el traslado, aunque tendría que ser cuestión de días.
En la Escola de Canteiría de Poio hay en paralelo varios proyectos en marcha relacionados con Vigo, entre ellos un horno para el instituto Manuel Antonio, en el Meixoeiro, y un cruceiro para Lavadores. La Escola ha conseguido una notable proyección a nivel nacional y recientemente se matriculó un alumno de Madrid, que decidió desplazarse  a Pontevedra para poder realizar los estudios de trabajo en piedra. n