El juicio contra un conductor octogenario que en marzo de 2016 arrolló a un pelotón de ciclistas vigueses y del Miñor en A Guarda, dos de cuyos componentes fallecieron a consecuencia de las lesiones sufridas, ha sido aplazado al próximo 19 de diciembre por estar el acusado ingresado en un hospital. Así lo ha avanzado el abogado de Manuel Benito A.L., que hoy tiene 91 años, tras la suspensión de la vista oral en Juzgado Penal de Pontevedra. Aunque en teoría el 19 de diciembre se reanudaría, entre los afectados había ayer convicción de que muy difícilmente habrá juicio, dada la edad del acusado. Algunos de los heridos ya han obtenido permiso para no volver a declarar como testigos en el juicio, si es que se inicia. Y casi todos han cobrado el seguro y tienen ganas de "olvidarse de todo". Han pasado casi cuatro años.
La Fiscalía pide para Manuel Benito A. L., que en el momento de los hechos tenía 87 años, cuatro años de cárcel por dos delitos de homicidio por imprudencia grave, y otros seis por lesiones graves, mientras que una de las acusaciones particulares pide que, adicionalmente, se le condene por omisión del deber de socorro. Carlos Borrás, abogado del acusado, relató que su cliente tuvo que ingresar de urgencia este domingo en un centro hospitalario por "una dolencia física" que no sabe si "va a durar o no". Espera el letrado que para el 19 de diciembre pueda estar disponible, aunque admitió que "no lo puedo garantizar". El abogado de la defensa pedirá la libre absolución de su representado al considerar que "no hay responsabilidad penal, sino una mera responsabilidad civil" que quedó resuelta en "casi el 90%" de los casos. Y es que la mayoría de los ciclistas arrollados por Manuel Benito A.L. ya recibieron sus indemnizaciones, incluidas las familias de los dos fallecidos.
Borrás ha indicado que varios ciclistas han renunciado a la vía penal tras ser indemnizados. Preguntado por si su cliente es declarado culpable, entraría en la cárcel pese a su avanzada edad, ha indicado que no planteará en su estrategia de defensa ningún "tipo de cuestión" relacionada con ello, y ha añadido: "tampoco creo que haya muchas personas de noventa y pico años en las cárceles españolas".
En la instrucción de la causa, el juez de Tui descartó que el acusado incurriera en un delito de omisión del deber del socorro. Una de las acusaciones sostiene, sin embargo, que en fase de instrucción quedó demostrado que el conductor no paró y siguió su marcha tras arrollar al pelotón de ciclistas y que no tuvo intención de socorrer. La versión de la defensa es que se ausentó del lugar del atropello y se fue hasta un restaurante, donde llamó a la Policía, porque le pareció que aquella era la mejor forma de pedir auxilio. n
