El enfrentamiento, a botellazos, y que causó cortes a dos de los implicados, comenzó por una disputa por la música
El Juzgado de Instrucción número 1 de Vigo investiga a tres jóvenes por un presunto delito de lesiones durante una pelea ocurrida en un botellón en septiembre del año pasado en A Laxe. Junto a estos tres, otros dos, menores, también tendrán que responder por los mismos hechos aunque la causa la lleva el juzgado de Menores de Pontevedra.
Los hechos se produjeron en uno de los botellones multitudinarios en el entorno de Montero Ríos, cuando un grupo formado por tres jóvenes y dos chicas, todos mayores de edad, comenzaron una pelea a botellazos con otro compuesto por tres menores. A consecuencia de la reyerta, uno de los adultos resultó con cortes de diversa consideración y uno de los menores. En la refriega habría participado un tercer adolescente que no ha podido ser identificado a día de hoy ya que los otros dos que estaban con él declararon que lo conocieron ese día y sólo recordaban su nombre de pila.
La causa en el juzgado de Menores está prácticamente finalizada a la espera de los escritos de calificación previos para ir a juicio, mientras que la instrucción continúa en el juzgado de Vigo, que ayer tomó declaración a los implicados.
El motivo que originó la bronca estaría causado por la música que una de las pandillas tenía puesto con altavoces y móviles. Los testimonios son contradictorios en este punto y se culpan mutuamente sobre quién reprochó a quien que la mencionada música que sonaba no les gustaba.
El comentario, en el que parece haber coincidencia, provocó una fuerte discusión en la que los chicos, utilizando las botellas de vidrio del alcohol que estaban ingiriendo en la zona, para golpear a sus contrincantes.
La pelea obligó a intervenir a la Policía y las emergencia sanitarias.
Los incidentes durante las aglomeraciones de jóvenes en el entorno de A Laxe son frecuentes. Los propios vecinos y hosteleros llevan tiempo denunciado públicamente no sólo las peleas sino la elevada ingesta de alcohol entre menores de edad que se dan cita de madrugada y que ha generado, en fechas señaladas, multitud de intervenciones por parte de los sanitarios.
A eso, se añaden los actos vandálicos y otro tipo de conductas incívicas que se hicieron especialmente importantes durante noches como la de Samaín o en la finalización de exámenes.
El episodio que irá a juicio se produjo en el inicio del curso, el 23 de septiembre.
Los hechos se produjeron en uno de los botellones multitudinarios en el entorno de Montero Ríos, cuando un grupo formado por tres jóvenes y dos chicas, todos mayores de edad, comenzaron una pelea a botellazos con otro compuesto por tres menores. A consecuencia de la reyerta, uno de los adultos resultó con cortes de diversa consideración y uno de los menores. En la refriega habría participado un tercer adolescente que no ha podido ser identificado a día de hoy ya que los otros dos que estaban con él declararon que lo conocieron ese día y sólo recordaban su nombre de pila.
La causa en el juzgado de Menores está prácticamente finalizada a la espera de los escritos de calificación previos para ir a juicio, mientras que la instrucción continúa en el juzgado de Vigo, que ayer tomó declaración a los implicados.
El motivo que originó la bronca estaría causado por la música que una de las pandillas tenía puesto con altavoces y móviles. Los testimonios son contradictorios en este punto y se culpan mutuamente sobre quién reprochó a quien que la mencionada música que sonaba no les gustaba.
El comentario, en el que parece haber coincidencia, provocó una fuerte discusión en la que los chicos, utilizando las botellas de vidrio del alcohol que estaban ingiriendo en la zona, para golpear a sus contrincantes.
La pelea obligó a intervenir a la Policía y las emergencia sanitarias.
Los incidentes durante las aglomeraciones de jóvenes en el entorno de A Laxe son frecuentes. Los propios vecinos y hosteleros llevan tiempo denunciado públicamente no sólo las peleas sino la elevada ingesta de alcohol entre menores de edad que se dan cita de madrugada y que ha generado, en fechas señaladas, multitud de intervenciones por parte de los sanitarios.
A eso, se añaden los actos vandálicos y otro tipo de conductas incívicas que se hicieron especialmente importantes durante noches como la de Samaín o en la finalización de exámenes.
El episodio que irá a juicio se produjo en el inicio del curso, el 23 de septiembre.
