La irrupción del coronavirus en la rutina de la población se produce en todos los frentes, incluso en lo referente a la gestión de residuos y el reciclaje, sobre todo cuando es posible encontrarse guantes desechables y mascarillas tiradas en el suelo. Por ello, Sogama –a la que están adscritos 295 ayuntamientos gallegos–recuerda que estos “nuevos desechos” deben introducirse en el contenedor verde genérico, dentro de una bolsa cerrada; jamás en el amarillo ni tampoco en cualquier otro recipiente de recogida selectiva.
Las instalaciones de Sogama integradas en el Complejo Medioambiental de Cerceda (A Coruña) están automatizadas, evitando de esta forma que los operarios tengan contacto con las bolsas de basura. La parte no reciclable de la basura, en la que se integran mascarillas y guantes desechables, además de otros productos tales como toallitas higiénicas y bastoncillos de algodón, es valorizada energéticamente, con todos los requisitos ambientales, a temperaturas superiores a 850 grados, garantizando de esta forma la destrucción de patógenos. En el caso de las toallitas húmedas, es preciso tener en cuenta que no pueden arrojarse al inodoro, ya que, al estar fabricadas con un textil no tejido, forman una masa que provoca atascos en las redes de alcantarillado, equipos de bombeo y depuradoras, circunstancia que provoca problemas técnicos y encarece en buena medida el mantenimiento, tratamiento y depuración de las aguas residuales.
Desde Sogama solicitan a la población que, además de ser cuidadosa y responsable a la hora de utilizar correctamente los elementos de protección individual, siguiendo las indicaciones de las autoridades sanitarias en cada momento, actúe con la misma responsabilidad a la hora de deshacerse de ellos. Nunca al suelo, nunca al inodoro, nunca al entorno y, por supuesto, nunca a contenedores que no sea el verde convencional. En caso de que haya alternativas reutilizables, se recomienda optar por éstas, siempre y cuando aseguren las condiciones de higiene y salud, así como la correcta desinfección antes de cada uso.
Las instalaciones de Sogama integradas en el Complejo Medioambiental de Cerceda (A Coruña) están automatizadas, evitando de esta forma que los operarios tengan contacto con las bolsas de basura. La parte no reciclable de la basura, en la que se integran mascarillas y guantes desechables, además de otros productos tales como toallitas higiénicas y bastoncillos de algodón, es valorizada energéticamente, con todos los requisitos ambientales, a temperaturas superiores a 850 grados, garantizando de esta forma la destrucción de patógenos. En el caso de las toallitas húmedas, es preciso tener en cuenta que no pueden arrojarse al inodoro, ya que, al estar fabricadas con un textil no tejido, forman una masa que provoca atascos en las redes de alcantarillado, equipos de bombeo y depuradoras, circunstancia que provoca problemas técnicos y encarece en buena medida el mantenimiento, tratamiento y depuración de las aguas residuales.
Desde Sogama solicitan a la población que, además de ser cuidadosa y responsable a la hora de utilizar correctamente los elementos de protección individual, siguiendo las indicaciones de las autoridades sanitarias en cada momento, actúe con la misma responsabilidad a la hora de deshacerse de ellos. Nunca al suelo, nunca al inodoro, nunca al entorno y, por supuesto, nunca a contenedores que no sea el verde convencional. En caso de que haya alternativas reutilizables, se recomienda optar por éstas, siempre y cuando aseguren las condiciones de higiene y salud, así como la correcta desinfección antes de cada uso.
