¿Qué les llevó a aplicar restricciones en toda Galicia?
Estamos viendo un aumento progresivo en el número de casos, aunque todavía estamos por debajo de la media española. Queremos tomar medidas precoces, que duren lo menos posible y sean eficaces.
¿Seguirá este crecimiento? ¿Cómo se producen los contagios?
La mayoría de casos y brotes tienen relación con reuniones familiares y de amigos, situaciones en las que disminuimos nuestra vigilancia y somos menos cautos. Por eso insistimos tanto en la necesidad de reducir nuestro círculo de contactos y siempre con mascarilla.
¿Por dónde irá la curva?
Tomanos medidas para disminuir el número de casos y aplanar la curva, está en la mano de todos conseguirlo. Cada vez que nos sacamos la mascarilla con contactos que no son convivientes nos estamos poniendo a nosotros mismos, a quienes nos acompañan y a la población en general en situación de riesgo. Apelamos a la responsabilidad individual para salir de esta lo más pronto posible.
¿Crece la edad de los enfermos?
El perfil de edad es más joven en la segunda ola, como en todas partes. En los primeros meses se hacía la PCR solo a los más graves, no se diagnosticaban los casos más leves. Ahora diagnosticamos a casi todos los casos. Significa que los perfiles de edad cambian, pero si aumentan los contagios van a terminar llegando a la población vulnerable, a los mayores. Es verdad que nadie está libre de tener la enfermedad grave pero nadie está libre de transmitirla.
¿A partir de qué ocupación hospitalaria saltan las alarmas?
No trabajamos con un dato aislado, hacemos una valoración global con todos los indicadores que permiten conocer la situación actual y su evolución, los perfiles de edad, el riesgo, con todo eso tomamos decisiones. Un dato único es simplificar demasiado.
¿Colaboran los concellos?
Pedimos la colaboración de todo el mundo, concellos y población. Si no participamos todos no vamos a salir igual. Tenemos que colaborar del primero al último, cada uno en su nivel de responsabilidad.
¿Habrá más rastreadores?
Los rastreadores son fundamentales, que haya una vigilancia de los casos que se producen y de los contactos, se está haciendo un buen trabajo. Pero lo fundamental es insistir en que hay que facilitar el trabajo a esos ratreadores, que no tengan que hacer una búsqueda de muchos contactos porque hubo una fiesta de 20 personas.
En la primera ola se paró un 80% de la actividad hospitalaria para centrarse en el covid. ¿Qué ocurrirá ahora?
Planteamos estas medidas con el objetivo de que los hospitales puedan atender a pacientes covid pero también mantener su actividad asistencial normal. La medida fundamental que tenemos es la prevención de la transmisión. Nuestro objetivo fundamental es que los hospitales no se paralicen para nada, que mantengan toda la actividad quirúrgica, las consultas y demás. Tenemos que ser capaces de mantener la actividad asistencial normal y atender a los pacientes covid. Es el objetivo que nos tenemos que plantear y con el que estamos trabajando.
¿Cómo se están comportando los colegios?
Los centros educativos son sitios seguros, no son un problema. El riesgo cero no existe en ningún caso, pero los profesores hicieron un trabajo magnífico para cumplir todas las medidas recomendadas por sanidad y los protocolos.
¿Se puede decir que Galicia escuchó a sus sanitarios?
Diría que sí. Estamos trabajando desde hace meses en el comité para hacer propuestas a la Consellería de Sanidade y a las consellerías responsables. Ese trabajo es lo que nos está llevando a que Galicia esté en una situación razonablemente mejor que otras comunidades y así vamos a seguir trabajando.
¿Se inspiran en algún país?
Hay mucha bibliografía sobre cómo actuar. Nos movemos siempre en una situación de bastante incertidumbre, porque eso empezó hacer unos meses. Procuramos que las medidas que se toman sean razonables, proporcionadas y ajustadas a recomendaciones generales.
¿Qué ocurrirá con la gripe?
Se va a prevenir también con las mascarillas y distancias. Ningún paciente vulnerable de grupos riesgo debe quede sin vacunar para evitar la sobrecarga del hospital.n
