En 2012 el Concello de Baiona puso en marcha una campaña para promover que no se fumara en las playas y así nació "Praias sen fume", que en 2016 ya tenía 26 playas y que ahora se está extendiendo por todo el litoral gallego. El programa de la Xunta tiene un fin educativo y su cumplimiento es voluntario. Ya son 141 playas de 64 concellos las que se han adherido.
Además, los concellos de Baiona, Corcubión y Rianxo cuentan con la acreditación de oro, que es el máximo nivel al que se puede optar al declarar todas sus playas sin humo.
En 2017 se incorporó la posibilidad de incluir playas fluviales, lo que amplió a todas las provincias gallegas la posibilidad de formar parte de esta iniciativa de promoción de la salud. También se extendió la red a otros ámbitos con la Rede Galega de Portos Sen Fume, con la finalidad de sensibilizar a los usuarios y visitantes de puertos deportivos de los beneficios de vivir sin tabaco.
La Consellería de Sanidade realizó una encuesta a los usuarios de las playas para evaluar la respuesta a la iniciativa. El trabajo de campo se llevó a cabo el verano del año pasado y el 71,6% de los usuarios de las playas valoró esta iniciativa como buena o muy buena 7,4 puntos más que en 2017. Además crece el porcentaje de usuarios de las playas (68,7%) a los que les gustaría que la iniciativa se extendiese a otras playas en el futuro y el 57,8% considera que debería extenderse a otros espacios al aire libre. n
