ENTREVISTA

Fernández Bouzas: "Hay sorpresas de Cíes que todavía quedan por contar, tesoros ocultos que siguen ahí"

José Antonio Fernández Bouzas, director del Parque Nacional.
photo_camera José Antonio Fernández Bouzas, director del Parque Nacional.

José Antonio Fernández Bouzas, también conocido como 'Pepín' llegó a la dirección del Parque Nacional Illas Atlánticas hace ya 16 años aunque inicialmente solo iban a ser tres meses. 

¿Qué queda por descubrir de Cíes?

Mucho. De la parte sumergida sabemos muy poquito. También queda la parte histórica. Tenemos unos retazos de la historia de las islas Cíes, pero aún queda por hacer el libro de su historia. Sabemos bastante de los romanos, de los fenicios, muchas cosas, pero aún falta un enlace desde 1700 hasta ahora. Hay huecos que están por escribir. Debemos buscar a alguien, un historiador ameno que nos haga el libro de las islas Cíes. También la parte etnográfica, porque hay sorpresas que daremos en breve. Sorpresas de Cíes que están sin contar, que siguen ahí, tesoros ocultos que siguen a la vista. 

Cíes ya no es solo playa, ¿se nota el cambio en el perfil del visitante?

Va cambiando y costó mucho. Cuando empezamos en el Parque Nacional en 2002 la gente venía a ver solo la playa. Ya antes, cuando era Parque Natural, la gente venía a la playa y la temporada comenzaba en julio y acababa a partir del 16 de agosto. Eso ya se acabó, estamos en temporada todo el año. Hemos pasado de tener un 5% de rutas guiadas, que era una miseria, y andamos en el 20-25% actualmente. Hemos dado un salto espectacular, pero nos queda mucho recorrido. Ya no es un parque solo de playa, son montes, son bosques, es historia.

¿Cíes es ya un ejemplo de turismo verde con nombre propio?

Aún le falta. Tenemos que cambiar el chip entre todos, pero aún nos queda camino

¿Perciben esa mayor concienciación también por parte de los visitantes?

Sí que se empieza a notar. Hay más gente que pregunta por especies, por la historia, por la flora y la fauna. Ya van a hacer buceo, esnórquel y está triunfando. Estamos dando saltos muy importantes, pero aún queda trabajo. 

Hablando de visitantes, ¿Cíes ha tocado techo?

En temporada sí, hay un cupo que hay que respetar, pero queda el invierno y temporadas en otoño. Ahí es donde tenemos que incidir. Que la gente pueda ir al parque respetando los cupos, haciendo rutas guiadas, otro tipo de visita. El parque está abierto todo el año y también aumentó mucho el buceo guiado de clubes de Vigo y el entorno.

¿En qué estado se encuentra la recuperación de especies?

Seguimos retirando especies exóticas como el eucalipto o la acacia. Ahí continuaremos durante años porque llevará tiempo y tiempo. No se puede cortar todo de repente porque quedaría el monte desnudo. No es cortar y plantar, es recuperar hábitats. Quitar un eucalipto de Cíes cuesta un dinero importante, pero hay que hacerlo. La meta es recuperar los ecosistemas que están degradados por los eucaliptos. No pintan nada en la isla y tenemos que retirarlos poco a poco. Se está viendo ya parcelas en Cíes cerca de Figueiras o la zona del castro en las que retiramos acacias y eucaliptos y vamos viendo como van recuperándose con cerquiños, salgueiros o madroño. 

¿Habrá algún día transporte público a la isla sur?

No. Es una zona de reserva. Todo Parque Nacional tiene una parte de reserva, nosotros tenemos la isla de San Martiño y la zona de acantilados. Tenemos que protegerla porque ahí tendremos novedades. Esa isla es un reservorio de fauna y flora que solo tenemos ahí. Hay cerquiños que son únicos en Galicia y zonas degradadas que tenemos que recuperar por la plantación de eucaliptos. Esa isla no tiene servicios, solo la playa a la que se puede ir en una embarcación y ya está. No tiene vocación de uso público.

Habla de novedades en el Parque Nacional, ¿qué puede adelantarnos?

De aquí a fin de año vamos a descubrir un poco más de la historia de Cíes. Hace unos días aparecieron de nuevo las bolas de cañón en la playa de Nuestra Señora por el movimiento de las arenas y la marea. Ocho bolas todas juntas en un lugar de la playa que quedan allí enterradas porque están bien así. Hay que descubrir la historia que hay detrás, como el cuartel de artillería que hay allí o de la gente que vive en la isla. El guarda mayor que tenemos en las islas vivió 48 años, se va a jubilar pronto y queremos que nos cuente más historias de la isla que las tiene solo en su cabeza. 

Te puede interesar