“La dislexia no es una enfermedad, es una forma diferente de pensamiento. El sistema educativo no ha sabido adaptarse a estos niños que en muchos casos se ven abocados al fracaso escolar”. Esto afirmó ayer en Vigo la presidenta de la Asociación Gallega de Dislexia, Esther López, quien destacó que a diferencia de otras comunidades Galicia sí cuenta con una normativa de atención a la diversidad pero que no se cumple en muchas ocasiones. Éste es uno de los ejes centrales de las cuartas Jornadas Gallegas de Dislexia que se celebran ayer y hoy en el Centro Social Afundación.
Docentes, profesionales de gabinetes psicopedagógicos y familiares de niños que padecen dislexia o discalculia se reúnen desde ayer en estsa jornadas que cuentan con la participación de numerosos expertos de toda España. El objetivo es actualizar conocimientos y concienciar sobre la necesidad de atender mejor a estos niños, que sufren un impacto emocional y que pueden fracasar en los estudios. “Son alumnos con capacidades enormes, pero con dificultades de aprendizaje. Es necesario mejorar la forma de enseñar”, explicaba ayer Anita Pestaña, presidenta de Dislexia Canarias y otras Dificultades de Aprendizaje. Se habló asimismo de la discalculia (dificultad en las matemáticas), que abordó el profesor de la Universidad de Barcelona, Josep Serra, para quien es necesario dar visibilidad a estos alumnos que alcanzarían las mismas metas con apoyo y esfuerzo. Los expertos reclaman más formación para el profesorado.
