Dicen que las oposiciones sacaron a la luz sus condiciones de trabajo y piden más plazas
n n n Enfermeras eventuales de Vigo acudirán vestidas de negro a las oposiciones convocadas por el Sergas el próximo día 12 de mayo en Silleda para mostrar su indignación por las condiciones “precarias” que padecen, encadenando contratos de muy corta duración, sin vacaciones (sería un mes sin sueldo sin cotizar que se puede truncar por necesidades del servicio), con cambios de turno que conocen con una semana de antelación, bajas que se penalizan o la obligación de incorporarse cuando las llaman con al menos tres horas de antelación si no quieren exponerse a sanciones de un año sin trabajar, entre otras circunstancias que les impiden conciliar y “tener vida fuera del hospital”.
Aseguran que con la crisis y los recortes empeoró su situación y que las oposiciones, que son prácticamente obligatorias para ellas, sacaron a la luz el elevado número de enfermeras eventuales que trabajan en Galicia frente al personal fijo y en especial en el área viguesa.
El 12 de mayo se examinan más de 8.000 enfermeros para un total de 372 plazas libres, sin contar promoción interna y discapacitados. No presentarse supone bajar su puntuación en las listas de contratación y como consecuencia no trabajar. Lograr plaza es misión casi imposible porque son pocas y porque las condiciones se han vuelto a endurecer este año al pasar de exigir 7 años de antigüedad a 11 años y medio para lograr la máxima puntuación. Creen que hasta los 40 años como mínimo no podrán aspirar a una plaza y señalan que muchas enfermeras se jubilan sin haberlo conseguido. Por eso reclaman que se convoquen más plazas, porque no se están cubriendo todas las vacantes y algunas plazas se amortizan. “Dicen que en los próximos dos años se va a jubilar la primera gran generación de enfermeras”, apuntan.
En Vigo hay 2.017 enfermeras eventuales en la lista de contratación. El día del examen, que cae en domingo, el Sergas tendrá dificultades para cubrir los mínimos precisamente por el elevado número de eventuales que un sindicato cifró esta semana en el 40%.
Además, explican que las bajas en el colectivo responden a los cambios en el puesto de trabajo, un día en UCI , otro en quirófano y al siguiente a planta o Urgencias, a veces sin la formación específica para alguno de los servicios críticos. Señalan que no les pagan un plus por los servicios especiales ni por peligrosidad como en la privada.
Las eventuales señalan que no se sienten representadas por los sindicatos y se comunican a través de un grupo de Facebook. Reclaman la convocatoria de más plazas públicas, que se valoren los servicios especiales y la mejora de sus condiciones de trabajo, por ejemplo con contratos de mayor duración (“ahora procuran que no llegue a dos meses porque eso supone que acumulas un día libre”), que se respeten los turnos para poder planificar su vida o que se pague el plus de peligrosidad, entre otras. Explican que esta situación provocó que muchas enfermeras emigrasen a Londres, Francia o Portugal en busca de una mayor estabilidad o que se fuesen a la privada. n
