La Guardia Civil de Tráfico detecó a 86 conductores que dieron positivo en test de alcoholemia y a otros 23 que conducían bajo los efectos de las drogas tras los excesos en las celebraciones de esta cita estival en Vilagarcía
Después de la fiesta y los excesos se pagan con una resaca y como si del cuerpo humano se tratase, algunos asistentes a la Festa da Agua de Vilagarcía vieron a las pocas horas las consecuencias de esta jornada de desenfreno. La Guardia Civil de Tráfico detectó a 86 conductores que dieron resultado positivo en test de alcoholemia y a otros 23 que conducían bajo los efectos de las drogas durante las pruebas realizadas con motivo de esta fecha ineludible en el calendario estival. Estas cifras dan como resultado 109 conductores denunciados –20 menos que el año pasado en la misma festividad– tras un operativo en el que se realizaron un total de 3.015 pruebas para vigilar el consumo de sustancias psicoactivas en la red viaria del término municipal del ayuntamiento de Vilagarcía de Arousa.
La Guardia Civil informó ayer en un comunicado que llevaron a cabo 2.970 pruebas de detección de alcoholemia, 86 resultaron positivas de las que 77 fueron denunciadas por vía administrativa y 11 por vía judicial, ya que estas últimas superaron la tasa establecida de 0,60 miligramos por litro de aire inspirado. En cuanto al test de drogas, los agentes efectuaron 45 pruebas de detección de estas sustancias. De los conductores sometidos a la prueba salival más del 50 por ciento resultaron positivas, es decir, 23 personas cometieron esta infracción que se cataloga como “muy grave” y está castigada con una sanción de 1.000 euros y la retirada de 6 puntos del carné de conducir .
Por otra parte, las fuerzas de seguridad explicaron que durante la celebración de la Festa da Auga no tuvieron lugar siniestros viales graves en las vías interurbanas limítrofes al municipio de Vilagarcía de Arousa y que el número de infracciones descendió ‘‘ligeramente’’ con relación a la anterior edición de la Festa da Auga.
Con todo, la Guardia Civil destacó que ‘‘aún siguen siendo demasiados aquellos que hacen uso del vehículo tras el consumo de sustancias psicoactivas” y por ello recordó que ‘‘el alcohol multiplica por cinco el riesgo de accidente” cuando se conduce con una tasa superior al límite en vía administrativa y por 100 cuando se sobrepasa el límite penal, de 1,2 gramos de alcohol por litro de sangre.
En el caso de las drogas, la posibilidad de sufrir un accidente se sitúa entre dos y siete veces más con respecto a los conductores no consumidores. Además, la ley prohíbe conducir con presencia de drogas en el organismo del conductor, excepto bajo prescripción médica.
La Guardia Civil informó ayer en un comunicado que llevaron a cabo 2.970 pruebas de detección de alcoholemia, 86 resultaron positivas de las que 77 fueron denunciadas por vía administrativa y 11 por vía judicial, ya que estas últimas superaron la tasa establecida de 0,60 miligramos por litro de aire inspirado. En cuanto al test de drogas, los agentes efectuaron 45 pruebas de detección de estas sustancias. De los conductores sometidos a la prueba salival más del 50 por ciento resultaron positivas, es decir, 23 personas cometieron esta infracción que se cataloga como “muy grave” y está castigada con una sanción de 1.000 euros y la retirada de 6 puntos del carné de conducir .
Por otra parte, las fuerzas de seguridad explicaron que durante la celebración de la Festa da Auga no tuvieron lugar siniestros viales graves en las vías interurbanas limítrofes al municipio de Vilagarcía de Arousa y que el número de infracciones descendió ‘‘ligeramente’’ con relación a la anterior edición de la Festa da Auga.
Con todo, la Guardia Civil destacó que ‘‘aún siguen siendo demasiados aquellos que hacen uso del vehículo tras el consumo de sustancias psicoactivas” y por ello recordó que ‘‘el alcohol multiplica por cinco el riesgo de accidente” cuando se conduce con una tasa superior al límite en vía administrativa y por 100 cuando se sobrepasa el límite penal, de 1,2 gramos de alcohol por litro de sangre.
En el caso de las drogas, la posibilidad de sufrir un accidente se sitúa entre dos y siete veces más con respecto a los conductores no consumidores. Además, la ley prohíbe conducir con presencia de drogas en el organismo del conductor, excepto bajo prescripción médica.
