Vigo

Distopía, el reto de tejer una red solidaria al margen de la caridad

Elisa Pérez, de Distopía, en el centro, en el comedor de la Esperanza.
photo_camera Elisa Pérez, de Distopía, en el centro, en el comedor de la Esperanza.
El colectivo comenzó como una asociación de apoyo a las protectoras de animales y dio el salto a la asistencia social

Heredero de la filosofía de la Red Solidaria Popular (RSP), el colectivo Distopía trabaja en Vigo y su área con  veinte familias en situación de riesgo. A diferencia de otras ONG, ésta implica a los beneficiarios en su logística. “La solidaridad no se puede confundir con la caridad, queremos crear una red que colaboré activamente en las campañas”, apunta Elisa Pérez, presidenta y promotora.

Antes de la pandemia, se centraban en los animales, colaborando con las protectoras en el abastecimiento de alimentos, pero las circunstancias sociales favorecieron que ampliasen el campo de acción. “Trabajamos con la Plataforma de Afectados por las Hipotecas (PAH), ya que desde el fallecimiento de su presidenta, Carlota Pérez, necesitan ayuda para reorganizarse”. Asimismo hacen un seguimiento de personas sin hogar, con las que organizaban antes de la llegada del coronavirus la cena en los soportales.

Pero la red que pretende tejer Distopía va más allá de la atención de emergencia, buscando el beneficio de distintos ámbitos sociales, ya que tal y como explica su presidenta"amamos a todas las especies". También organizan actividades para favorecer la integración en colaboración con asociaciones de personas sordas o de afectados de esclerosis múltiple con cursos de lenguajes de signos o la creación de una biblioteca. En el verano prevén retomar las acciones de carácter medioambiental como la limpieza de las playas o charlas en colaboración con Cetmar o el Instituto de Oceanografía. “La colaboración es fundamental, el otro día recibimos un lote de uno de nuestros grandes donadores y después de servir a nuestras familias, lo compartimos con el Comedor de la Esperanza, donde hacen un trabajo muy importante”, apunta Elisa. Esta semana, Eva Solla, de EU, se hizo eco de la labor de Distopía “imprescindible para las familias con pocos recursos”.

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