El hombre cuenta con amplios antecedentes y no había denuncia previa de malos tratos
La Policía Nacional detuvo en Ourense al presunto autor de la brutal agresión de una mujer, con la que al parecer mantenía una relación sentimental, en la madrugada del pasado martes. La víctima, oriunda de Guinea Bissau y de unos 40 años, se encuentra ingresada en la UCI en estado grave como consecuencia de las lesiones sufridas en la cabeza al ser golpeada con un objeto contundente que aún no ha sido localizado. El detenido, de 60 años, residente en Vigo, cuenta con dieciocho arrestos anteriores, varios de ellos por violencia, aunque no hay denuncias previas por parte de la víctima.
El presunto agresor, considerado como peligroso por la Policía, fue detectado hacia 13 horas de ayer en la estación de ferrocarril de Ourense por parte de un vigilante de seguridad que alertó a los agentes que desde el día anterior se encontraban peinando las zonas cercanas a la estación de trenes y autobuses de la capital ourensana.
La agresión se produjo sobre las seis de la madrugada del martes y el hijo de 11 años de la víctima fue testigo de la agresión. El menor se encontraba durmiendo en la casa y le despertaron los gritos, saliendo al exterior donde vio cómo era agredida y caía en medio de un gran charco de sangre. El niño gritó que la "dejase" y no la pegase más, momento en que un testigo escuchó los gritos y llamó a la Policía. Los agentes que acudieron hallaron a la víctima en el suelo, sangrando abundantemente por la cabeza, y a su lado su hijo, de 11 años, tremendamente asustado.
La mujer fue trasladada a un centro médico y los agentes escucharon al denunciante y al hijo de la víctima, quien relató que se encontraba dormido en la cama y que se despertó por los gritos de su madre. El menor indicó que tras gritarle al agresor pidiendo que dejase de pegar, huyó del lugar dejando a la mujer inconsciente. La patrulla acudió al domicilio del presunto agresor pero éste no se encontraba en la vivienda ni tampoco contestaba a las llamadas. La Policía recogió pruebas y se hizo cargo de la investigación una unidad especializada que logró localizar y detener al agresor, cuya brutal actitud parecía tener el objetivo de hacer el máximo daño posible.
El menor se encuentra confiado a una mujer conocedora de la víctima, que hasta la detención del presunto agresor estaba custodiada por agentes de la Policía Nacional en el hospital.
El detenido fue puesto a disposición del Juzgado de Guardia de Ourense y el asunto se llevó también ante el Juzgado de Violencia sobre la Mujer de Vigo, encargado del caso y ante el que será presentado el hombre en las próximas horas. n
