La delegada pidió que "nadie trate de crear una voz única" y tendió la mano a Concello, Diputación y Zona Franca
nnn La toma de posesión de Corina Porro como delegada de la Xunta en Vigo fue ayer un acto multitudinario y al que la nueva líder del Gobierno gallego en la ciudad imprimió su propio sello, al elegir la calle para celebrarlo, en el exterior del edificio institucional de Las Avenidas. En su primer discurso como delegada puso por delante su “compromiso de estar siempre tejiendo consensos” porque “la cooperación entre administraciones es la mejor garantía de futuro”, dijo.
Sus primeras palabras fueron para dar las gracias al presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, que ayer la acompañó junto con el vicepresidente, Alfonso Rueda, y buena parte del Gobierno gallego (los conselleiros Vázquez Almuiña, Valeriano Martínez y José González), otros tres delegados de la Xunta (Pontevedra, Ourense y Lugo), el presidente del Parlamento, la diputada Ana Pastor o el rector de la Universidad de Vigo. "Sé, presidente, que tu eres el primer cómplice de esta labor de la que me responsabilizo a partir de hoy. Sé que Vigo está en tu cabeza y en tu corazón", señaló, para luego agradecer el trabajo del delegado saliente, Ignacio López Chaves, que ya tomó posesión como presidente del Consello Galego de Competencia.
Corina Porro aseguró que "entrego toda mi energía y mi capacidad para hacer presente más, si cabe, la enorme tarea que la Administración autonómica realiza. De otra, me comprometo con sus ciudadanos a representar sus intereses y sus necesidades y a negociar aquello que precisen de la Xunta de Galicia, una administración cercana y necesaria", subrayó.
Destacó que "la Xunta de Galicia es Vigo y Vigo es la Xunta de Galicia" porque la administración son "los colegios de Vigo, sus centros de salud o sus residencias de mayores".
La nueva delegada mostró su deseo de que “el Área de Vigo recupere la vocación abierta y que nadie pregunte de quién eres sino a qué vienes”. En clara alusión al alcalde vigués señaló que Vigo necesita recuperar “la pluralidad que siempre la ha caracterizado” y reclamó que “nadie trate de crear una voz única y el que no concuerde que sea tratado como disidente a la causa de la ciudad”, apuntó. Así que tendió la mano al Puerto, Zona Franca, Diputación y "porque todos compartimos un objetivo común: Vigo. Porque la política partidaria es una cosa y la administración de los asuntos públicos otra bien distinta", dijo, para advertir de "mayorías que pueden actuar como minorías maltratadas erigiéndose como luchadores contra las fuerzas invisibles del mal".
Corina Porro concluyó avanzando que "nos veremos en las calles, en las alamedas y en nuestras celebraciones populares, culturales y sociales". n
