El conductor del atropello múltiple en Florida pudo sufrir un golpe de calor

Imagen de cómo quedó el Audi tras impactar contra la marquesina de un autobús en la avenida de La Florida después del atropello.
photo_camera Imagen de cómo quedó el Audi tras impactar contra la marquesina de un autobús en la avenida de La Florida después del atropello.
El septuagenario perdió el control de su coche tras un desvanecimiento, subiéndose a la acera y arrollando a una peatón, en estado grave, hasta impactar contra una marquesina. Otros dos ocupantes del coche fueron atendidos

La tragedia rozó ayer la avenida de Florida. Eran la 1,40 de la tarde cuando un Audi Q5, sin control, que circulaba desde la Avenida de América hacia Camposancos, invadió la acera a la altura del número 80 por el carril izquierdo llevándose por delante un árbol, arrollando a una peatón e impactando finalmente contra la marquesina de un autobús, donde por fortuna solo había cerca otra persona que pudo salir corriendo.

 

 

Según informó la Policía Local,  el conductor, de 70 años, sufrió un desvanecimiento, posiblemente por un golpe de calor. En el interior del vehículo viajaban dos personas, que también fueron atendidas aunque con lesiones leves. La copiloto salió del coche en un gran estado de nervios, “intenté que recuperara el coche, pero no pude”, gritaba según los testigos.  

En el suelo, la viandante, una vecina de la zona de 67 años, con fracturas graves en las piernas que fue trasladada al Hospital Álvaro Cunqueiro. Hasta el lugar, el 112 movilizó además de a la Policía Local, al 061 y a los bomberos de Vigo. Los sanitarios fueron los primeros en atender a los heridos. El conductor, todavía en el vehículo, pudo ser evacuado por los facultativos tras mover los asientos para atrás.

 

 

Una dotación de primera salida del parque de Coruxo tuvo que cortar parte de la marquesina para extraer el tejado, y después con una grúa del parque de Teis retirar el soporte, informaron desde bomberos. El impacto además causó daños en otros tres vehículos que estaban estacionados. El accidente fue brutal. Varios testigos relataban cómo el coche “no paraba y zarandeó a la viandante por los aires, fue horrible". El golpe hizo romper los cristales de la marquesina en mil pedazos que quedaron espercidos por la zona pero que, por fortuna, no causaron mayores daños.

Se trata del tercer accidente de similares características que se registra en la provincia por vehículos que invanden zonas peatonales tras perder el control. En los dos casos anteriores, los coches eran automáticos y aunque el Audi Q5 implicado también podría serlo, la Policía Local descartó que este aspecto estuviera relacionado con el siniestro.

Te puede interesar