Si bien la cuesta de enero es ya un clásico en la gestión de la economía familiar, la vuelta de las vacaciones –y, en especial, el regreso a las aulas– es, cada vez más, uno de los momentos más críticos para las cuentas corrientes de las familias a lo largo del año. Tanto que ya se habla de ‘cuesta de septiembre’, y la de este año es más empinada si cabe debido al encarecimiento del material escolar, los carburantes y la alimentación, entre otros.
El último informe de la OCU (Organización de Consumidores y Usuarios) señala que los gallegos se gastarán, de media, unos 1.361 euros por hijo en lo que respecta a gastos anuales relacionados con la escuela. De ellos, casi la mitad (unos 530 euros) se dedica solamente al material que necesitarán este mes de septiembre para volver a las clases, incluyendo la ropa y el calzado. De acuerdo con este informe, el gasto medio en libros de Primaria ronda los 200 euros, Secundaria los 242 y Bachillerato los 257; aunque librerías de Vigo apuntan que las listas de libros de los diferentes centros pueden irse hasta los 300 euros si se trata de Primaria y los 400 en el caso de Secundaria y Bachillerato. Todo ello motivado por el encarecimiento del papel, uno de los materiales que más ha subido de precio en estos últimos años.

Como recoge la última actualización del IPC, los artículos de papelería son un 4,6% más caros que en 2022 en Vigo y provincia, lo cual ha contribuido a incrementar todavía más los gastos de la ‘vuelta al cole’. Asimismo, también subieron un 4,5% los materiales relacionados con la enseñanza secundaria y un 2,1% los de la enseñanza superior (universidades y FP). Por la contra, sí que se apunta un descenso del 3,9% en todo lo relacionado con la Educación Infantil y Primaria.
El combustible, al alza
En una época en la que muchas familias comenzarán a usar el coche con más asiduidad, sobre todo para dejar y recoger a los más pequeños en el colegio, también preocupa la subida de los precios de los carburantes, que se han situado –especialmente la gasolina– en valores similares a cuando el Gobierno decidió instaurar la rebaja de los 20 céntimos en 2022. Así, el litro de gasóleo costaba ayer en Vigo entre 1,477 y 1,758 euros mientras que el de gasolina se acerca peligrosamente a la barrera de los 2 euros (entre 1,617 y 1,839 dependiendo de la estación de servicio).
Alimentos, un 10% más caros
Los últimos datos del IPC apuntan en Vigo y provincia a una subida de hasta un 10% en el grupo de los alimentos con respecto a hace un año y de un 1% si se toma como referencia el pasado mes. Con el aceite de oliva en precios de récord superando ya los 8 euros/litro en algunas marcas, la alimentación pone la puntilla a una cuesta de septiembre que cada vez es más empinada.
La nueva ley ‘obliga’ a las familias a comprar los libros
Como todos los años, los libros de texto suponen el principal desembolso de las familias. Además, este año la mitad de los cursos de Primaria y Secundaria pasan a estar regidos por la nueva ley, la Lomloe, por lo que las familias están ‘obligadas’ a tener que realizar este gasto en lugar de acudir a los bancos de libros. “No puedes acudir a un primo, hermana o estos bancos de libros. Las personas que los necesitan tendrán que pagar religiosamente los 30, 40 o 45 euros que están pidiendo en las librerías”, asegura Fernando Lacaci, presidente de la Confederación de Anpas Galegas, quien explica que la inflación ha afectado “escandalosamente” a los libros de texto y material escolar. Además, añade que esta situación, que es “rotunda” en los cursos pares, lo es casi también en los impares, ya que el rango de uso de los libros es corto, puesto que “sólo tienen un año de antigüedad”.