¿Habrá este año procesión del Cristo en el primer domingo de agosto? A día de hoy la respuesta es negativa, y en ello coinciden tanto la presidenta de la Cofradía, Marora Martín-Caloto, como el párroco de la Concatedral, Don Moisés Alonso, aunque con visiones distintas: mientras para el sacerdote sería imposible su desarrollo, quizá se podría hacer en formato reducido o mediante la retransmisión del paso sin compañía, según la Cofradía.
"Con las normas sanitarias en la mano no puede ser", advierte el responsable de la primera iglesia de Vigo y segunda de la Diócesis. “Es imposible autorizar una muchedumbre caminando a dos metros unos de otros, eso no va a poder ser, aunque la última palabra la tendrán las autoridades sanitarias, y el Concello, y lo que decida el obispo”, explicaba ayer a este diario. Don Moisés advierte de que resultará incluso muy difícil celebrar las novenas, muy concurridas, en la Colegiata de Santa María, así que se teme que por vez primera en 80 años Vigo se quedará con su gran manifestación religiosa, que se viene desarrollando de forma prácticamente ininterrumpida desde principios del siglo XVIII, cuando Felipe V ordenó conmemorar su victoria ante el pretendiente de la Casa de Austria en la Guerra de Sucesión.
Marora Martín-Caloto también es pesimista, pero no tanto como el párroco. En su opinión, hay que exprimir las posibilidades y celebrar “como sea posible”, quizá en formato reducido "con 2.000 personas siguiendo la imagen", señala, apenas un 5 por ciento de lo que resulta habitual a lo largo del domingo, pero al menos "una amplia representación", señala. "Hay que intentar todas las posibilidades, aunque no es fácil, ni siquiera celebrar la novena, por problemas de espacio", reconoce.
Los precedentes de procesiones celebradas tras el fin de la alarma, pero con las nuevas exigencias de Sanidad, no invitan al optimismo, si bien el Corpus de Pontearea se pudo realizar aunque sólo saliendo el párroco acompañado de un grupo de niños, mientras el público se tenía que contentar con seguir la fiesta desde la ventanas y en menor medida las aceras.
Una segunda posibilidad es que se pueda retransmitir el paso del Cristo, sin acompañantes, y al menos los fieles podrían seguirlo por televisión. "En la Cofradía vamos a estar preparados para hacer la procesión como nos dejen, como sea, si es posible con participación, aunque sea menor, y si no, con una transmisión para que se pueda hacer algo y no pasemos el día sin el Cristo", señalaba ayer Martín-Coloto.
Con todo, advierte de que todo dependerá finalmente de lo que vaya ocurriendo a lo largo de las próximas semanas "y si hay nuevos brotes o no, que con seguridad lo cambiaría todo", explica la presidenta de la Cofradía del Cristo de la Victoria.
