El virus lo ha cambiado todo e incluso ha modificado -o acelerado- datos económicos consolidados desde hace décadas, como acaba de constatar la Autoridad Portuaria "termómetro" de la actividad del área metropolitana y de toda Galicia. Según los datos del primer cuatrimestre del año, los intercambios comerciales de Vigo con el exterior por vía marítima en contenedores, la más importante con diferencia en el comercio internacional, han dado un giro: Francia ha dejado de ser el primer país en la suma de importaciones y exportaciones y el puesto lo ha tomado, como ya se esperaba, China. La explicación sería doble: por un lado una tendencia consolidada, positiva en el último caso y negativa en el país europeo; por otro, esencial, el parón en la automoción, que ha supuesto un bajón del 95 por ciento en la carga de vehículos desde Bouzas en abril, y también de piezas auto y bovinas de acero.
En lo que va de 2020, el comercio del puerto vigués con el gigante asiático ha crecido en casi un 25 por ciento con respecto al mismo período del año pasado: la epidemia nació en los mercados chinos, pero no ha tenido impacto alguno en este aspecto, sino al contrario. En concreto, son 72.376 toneladas las que se han movido de enero a abril, de ellas 50.000 de importaciones de productos de todo tipo, destacando los pesqueros, pese a que todavía se mantiene el desvío de algunos lotes a Leixoes (oporto) por problemas antiguos con el control de entrada de mercancías en Guixar.
El segundo puesto tampoco es en 2020 para Francia, sino para Marruecos, que sube un 21 por ciento y llega a 67.201 toneladas. En este caso, con el añadido de que la mayoría, casi 50.000, se corresponden con exportaciones. Por tanto, el país del norte de África se ha convertido ya en el primer cliente de las empresas de gallegas que cargan sus mercancías desde la terminal de Guixar, que suma alrededor del 65 por ciento de toda la comunidad autónoma.
Incluso Estados unidos se encuentra por encima, con un fuerte incremento creciente del 15 por ciento hasta las 52.000 toneladas, en su mayoría de exportación, lo que ha llevado a la instalación de un escáner especial pagado por el Gobierno de Washington que autoriza que el puerto vigués pueda enviar mercancías al país Norteamericano.
En cambio Francia, que siempre ha estado a la cabeza en las relaciones comerciales con Vigo, sufrió un descenso del 62,5 por ciento con respecto al primer cuatrimestre del pasado año y hasta el momento sólo ha sumado 48.582 toneladas.
Detrás de Francia se sitúa en quinta posición, y también subiendo con fuerza, el otro gigante de América del Norte. Un total de 35.397 toneladas se movieron con Canadá, el 95 por ciento de exportación de productos desde el puerto vigués. Esta relación se ha conseguido gracias a las líneas internacionales que tienen escala en Guixar.
A día de hoy, Vigo ya comercia de forma estable con intercambios importantes con cuatro continentes: con Europa (Francia y Bélgica sobre todo); con África (Marruecos); con Asia (China) y con América (Estados Unidos y Canadá, sobre todo). n
