Los mayores y las personas con discapacidad podrán regresar a sus instalaciones el próximo 15 de julio entre fuertes medidas de seguridad, con controles de temperatura, mascarillas y grupos reducidos
nnn Los centros de día empiezan a preparar sus instalaciones para abrir de nuevo las puertas el próximo 15 de julio tras el visto bueno de la Xunta. Una reapertura que supondrá un gran alivio para los mayores y las personas con discapacidad después de cuatro meses de cierre a causa de la pandemia del coronavirus.
Ángeles Álvarez directora del Centro de día Parque Castrelos y miembro de la Plataforma de Centros de Día de Galicia participó en la reunión con la Consellería de Sanidad donde se marcaron como requisitos la formación del personal y la elaboración de un plan de acción adaptado a las características de cada centro.
"Hemos tenido algunas diferencias con la administración que se han ido salvando y entendemos las precauciones que se han tomado ya que hablamos de un sector vulnerable", asegura Álvarez.
Entre las medidas de seguridad que se aplicarán en los centros de día para prevenir cualquier tipo de contagios de coronavirus están la medición de temperatura y desinfección del calzado a la entrada, las distancias de seguridad de metro y medio, grupos reducidos y el ya habitual uso de la mascarilla. Además se intensificará el protocolo de limpieza y desinfección en instalaciones y transportes. "Con estas medidas los centros van a ser más seguros que estar en una cafetería o en el cine", indica Álvarez.
En los centros de día de Apamp, la Asociación de Familias de Personas con Parálisis Cerebral, ya están todas las instalaciones preparadas al llevar dos semanas prestando tratamientos. "Todas estas medidas complican mucho el trabajo pero es lo único que podemos hacer para alejar al virus y es verdad que es incómodo, pero hay que hacerlo", asegura Somoza.
Desde los centros de día vigueses también se reconoce la labor de las familias durante los últimos meses "sobre todo ahora que se retomó la actividad laboral y no había soporte de cuidados para los familiares, es justo que este servicio se reactive para que vuelvan a tener por lo menos un tiempo para ellos", afirman desde Apamp.
Gladys dos Santos, directora de Vigo Maior, remarca la importancia de la reapertura de estos centros. "Desde que cerramos no tuvimos ningún usuario o trabajadores infectados por coronavirus pero durante estos meses hemos tenido 15 bajas, cuatro por fallecimientos, porque las familias no han podido prestar la atención que necesitaban", afirma dos Santos.
En este sentido, Álvarez asegura que "ha habido un clamor social, la población no estaba de acuerdo con la decisión de mantenerlos cerrados y durante este tiempo las personas se han deteriorado mucho". Por su parte, Somoza considera que cuatro meses sin recibir terapias y tratamientos "es mucho tiempo para las personas que atendemos, que tienen grandes necesidades de apoyo".
Durante los meses de confinamiento, muchos centros de día apostaron por ofrecer atención telemática a sus usuarios aunque como reconoce Somoza, "no es lo mismo, vale para un momento pero no para todo el tiempo que estuvimos cerrados". n
Ángeles Álvarez directora del Centro de día Parque Castrelos y miembro de la Plataforma de Centros de Día de Galicia participó en la reunión con la Consellería de Sanidad donde se marcaron como requisitos la formación del personal y la elaboración de un plan de acción adaptado a las características de cada centro.
"Hemos tenido algunas diferencias con la administración que se han ido salvando y entendemos las precauciones que se han tomado ya que hablamos de un sector vulnerable", asegura Álvarez.
Entre las medidas de seguridad que se aplicarán en los centros de día para prevenir cualquier tipo de contagios de coronavirus están la medición de temperatura y desinfección del calzado a la entrada, las distancias de seguridad de metro y medio, grupos reducidos y el ya habitual uso de la mascarilla. Además se intensificará el protocolo de limpieza y desinfección en instalaciones y transportes. "Con estas medidas los centros van a ser más seguros que estar en una cafetería o en el cine", indica Álvarez.
En los centros de día de Apamp, la Asociación de Familias de Personas con Parálisis Cerebral, ya están todas las instalaciones preparadas al llevar dos semanas prestando tratamientos. "Todas estas medidas complican mucho el trabajo pero es lo único que podemos hacer para alejar al virus y es verdad que es incómodo, pero hay que hacerlo", asegura Somoza.
Desde los centros de día vigueses también se reconoce la labor de las familias durante los últimos meses "sobre todo ahora que se retomó la actividad laboral y no había soporte de cuidados para los familiares, es justo que este servicio se reactive para que vuelvan a tener por lo menos un tiempo para ellos", afirman desde Apamp.
Gladys dos Santos, directora de Vigo Maior, remarca la importancia de la reapertura de estos centros. "Desde que cerramos no tuvimos ningún usuario o trabajadores infectados por coronavirus pero durante estos meses hemos tenido 15 bajas, cuatro por fallecimientos, porque las familias no han podido prestar la atención que necesitaban", afirma dos Santos.
En este sentido, Álvarez asegura que "ha habido un clamor social, la población no estaba de acuerdo con la decisión de mantenerlos cerrados y durante este tiempo las personas se han deteriorado mucho". Por su parte, Somoza considera que cuatro meses sin recibir terapias y tratamientos "es mucho tiempo para las personas que atendemos, que tienen grandes necesidades de apoyo".
Durante los meses de confinamiento, muchos centros de día apostaron por ofrecer atención telemática a sus usuarios aunque como reconoce Somoza, "no es lo mismo, vale para un momento pero no para todo el tiempo que estuvimos cerrados". n
