La presidenta del Consorcio Casco Vello de Vigo (CCVV) y delegada de la Xunta, Marta Fernández-Tapias, someterá este lunes a votación un presupuesto que supera los 4 millones de euros para 2021, el más alto de su historia. Fernández-Tapias recordó que el margen de actuación del CCVV viene limitado por la imposibilidad de adquirir varios inmuebles en la zona alta del barrio histórico y reclamó de nuevo la colaboración del Concello de Vigo.
La presidenta del CCVV garantizó que la aportación por parte de la Xunta, que este año vuelve a duplicarse con respeto al 2019, está condicionada a nuevas actuaciones. “No es un problema de fondos, sino de voluntad política”, advierte la representante autonómica, que insiste de nuevo en la “vieja aspiración del Consorcio” de que el alcalde de Vigo firme “de una vez por todas” el convenio de expropiación que mantiene paralizado desde lo 2017. “Es la única vía para que podamos seguir invirtiendo en la parte alta”, señaló. Según cifró, “estaríamos hablando concretamente de cinco edificaciones”, las correspondientes a Ferrería 1, Abeleira Menéndez 14, San Sebastián 20 y Subida al Castelo 9 y 11.
Solo en este caso, agregó Fernández-Tapias, se contemplaría la revisión de las aportaciones por parte de los organismos consorciados (participado en un 90% por la Xunta y en un 10 por el Ayuntamiento de Vigo) “por la cantidad que sea necesaria”.
Con todo, recordó que el programa de actuaciones se financiará principalmente con la venta de viviendas rehabilitadas además de las aportaciones de las distintas administraciones con un plan definido para continuar con la rehabilitación de la zona, que sumó 27 millones en varios ejercicios.
Desde 2005 el CCVV ya rehabilitó 108 viviendas y 33 locales. Del total de las 15 viviendas en rehabilitación ahora, siete están situadas en la zona alta del Casco Vello y ocho en O Berbés. Este año 2020 se prevé finalizar la obra de 3 de estas 15 viviendas.
El Concello expropia frente la Concatedral y en la Panificadora
Abel Caballero anunció que este martes se aprobaría en la Gerencia municipal de Urbanismo destinar una partida de los remanentes de tesorería, que ahora puede utilizar el Concello, para tres actuaciones urbanas claves en el Lagares, la Panificadora y el Casco Vello, frente a la Colegiata. En concreto, serán casi tres millones de euros para poner en marcha un tramo del paseo del corredor del Lagares, en la parte alta, y para hacer expropiaciones en la Panificadora, en concreto en la zona que da hacia la plaza del Rey, y también para el ayuntamiento se haga con la titularidad los edificios situados frente a la Concatedral, todos ellos en ruina.
Según precisó el alcalde vigués en una nota, son obras y proyectos urbanísticos que permitirán movilizar 2,8 millones de euros. Por partidas, señaló que unos 900.000 euros irán destinados al desarrollo del paseo del Lagares en su tramo más alto, en Cabral y Barreiro. Otros 1,5 millones se destinarán a expropiaciones de la Panificadora, en los edificios en ruina ante la plaza del Rey y el consistorio, de cara a dar los primeros pasos para la recuperación y rehabilitación del edificio industrial. También es llamativo que se expropiarán las viviendas ante la Concatedral "para hacer edificios dignos y en consonancia con esa zona del Casco Vello", explicó, lo que supondrá, otras obras por 400.000 euros. "Son 36 millones de euros para movilizar la economía", indicó el alcalde vigués, en la suma de todos los remanentes a utilizar.