El Consejo de la Gerencia Municipal de Urbanismo se reunió ayer con la participación del equipo redactor del nuevo Plan General de Ordenación Municipal de Vigo (PGOM), un encuentro tras el que se produjo un nuevo choque entre el PSOE y el BNG.
La concejala de Urbanismo, María José Caride, calificó de “hito” que el Plan cuente con informes favorables de todas las dependencias de la Xunta, entre ellas Patrimonio, así como la declaración ambiental estratégica que se publicó ayer en el DOG, lo que no evitó críticas al Ejecutivo autonómico.
Caride destacó la singularidad que supone que Vigo sea “la única ciudad y aérea metropolitana en que la Xunta, competente para definir el sistema viario en las áreas metropolitanas, no tiene ninguna intervención prevista, algo absolutamente excepcional”, de modo que denunció la presunta discriminaron de la ciudad por parte del Gobierno autonómico. Respecto a la transparencia en la elaboración del Plan, que según el BNG brilla por su ausencia, Caride valoró la decisión del gobierno local de incrementar en un mes el plazo para presentar alegaciones, y recordó que se estudiaron todas ellas, incluso aquellas entregadas fuera de plazo.
Por su parte, el BNG calificó el encuentro de “decepcionante” y lamentó que fuese la primera reunión del consejo tras más de dos años, “lo que supone en sí mismo una gravísima anomalía y da cuenta de cómo se está tramitando un documento estratégico para la ciudad”. Según Xabier Pérez Igrexas, en la reunión ni el equipo redactor ni Caride “dieron o quisieron dar respuestas claras sobres las cuestiones verdaderamente importantes y que preocupan a los vecinos”.
