MIles de personas se lanzaron a los descuentos y adelantaron las compras navideñas
Un aluvión de gente se vivió ayer en las principales calles comerciales de la ciudad por los descuentos del Black Friday o Viernes Negro. Esta jornada importada con importantes descuentos en los comercios se notó también en el tráfico, sobre todo por la tarde, con un colapso importante en las principales calles del centro y en especial en las más cercanas a las grandes superficies comerciales. Incluso los centros comerciales agotaron sus plazas de aparcamiento por la masiva afluencia.
Fue en realidad el pistoletazo de salida para las compras masivas de la Navidad, como viene ocurriendo desde hace años en Estados Unidos. En aquel país el Black Friday es el día de mayor movimiento comercial de todo el año.
En Vigo, muchas personas aprovecharon para buscar los regalos navideños con antelación y durante todo el día se vivió en las calles y en los centros comerciales un ambiente parecido al de las fechas señaladas de diciembre.
Los comercios respiraron aliviados en una temporada en la que el frío tardío había frenado las ventas de ropa y calzado. Las calles se llenaron de personas cargadas de bolsas con todo tipo de artículos, con un gasto superior a los 50 euros cada uno a pesar de ser fin de mes, mientras que las tiendas registraron en algunos casos largas colas para poder pagar.
Muy pocas personas permanecían ajenas a la vorágine de las compras, pero había alguno que lamentaba la “fiebre consumista” y ni miraba los escaparates.
