Los cuatro miembros de la banda albanesa, tres huidos, llevaban walkies talkies
nnn La célula del grupo criminal albanés que el miércoles por la tarde asaltó un chalé en San Andrés de Comesaña contaba con infraestructura y apoyo para la fuga. Así lo creen los investigadores que llevaban tiempo pisándoles los talones y que todavía buscan a los tres que consiguieron huir. Los ladrones llevaban guantes y, aunque iban a cara descubierta, portaban una especie de braga. Además, utilizaban walkies talkies para comunircarse entre ellos. De hecho, a uno de los asaltantes se le cayó uno al suelo cuando escapaba de la Policía Local.
El único detenido, identificado como E.L., de 32 años, se negó a declarar en Comisaría y hoy está previsto que pase a disposición del Juzgado de Instrucción 3 en funciones de guardia. El grupo de robos de la UDEV de la Comisaría ha contactado con la Guardia Civil y otras comisarías para recopilar toda la información sobre esta persona, que en el momento de su detención estaba indocumentado, pero que pudo ser identificado.
El ‘modus operandi’ de este grupo criminal es conocido por las fuerzas y cuerpos de Seguridad. Suele utilizar un ‘campamento base’ (casa rural, apartamento...) para establecerse de forma provisional y desde allí trasladarse a las zonas donde cometer los robos. A pesar de las restricciones por el covid, han conseguido colarse y moverse por rutas alternativas por Vigo y su área, ya que se sospecha que están relacionados con la ola de robos cometidos en Baiona.
Estos delincuentes están muy preparados, incluso ante una posible detención, utilizando distintas identidades y guardando silencio para obstaculizar el trabajo policial.
Las hipótesis apuntan a que los tres que lograron escapar a pie por el monte fueron recogidos por alguien de apoyo.
El vehículo en el que se desplazaron hasta la calle Viveiro, un Volvo S60 de color negro fue inspeccionado por la Policía. Dentro se encontraron pasamontañas y otros efectos compatibles con los hechos delictivos que se les atribuyen.
No es la primera vez que este tipo de grupos criminales actúan en la zona sur de Pontevedra. El año pasado, fueron detenidos otros tres individuos por medio centenar de asaltos en toda Galicia. También utilizaban coches de alta gama y se camuflaban entre los vecinos del entorno durante el día para poder vigilar sus objetivos. En los domicilios, actuaban de forma rápida para llevarse únicamente joyas y dinero, y las cajas fuertes que, tras abrirlas y llevarse el contenido, dejaban abandonadas en cualquier lugar cercano.n
El único detenido, identificado como E.L., de 32 años, se negó a declarar en Comisaría y hoy está previsto que pase a disposición del Juzgado de Instrucción 3 en funciones de guardia. El grupo de robos de la UDEV de la Comisaría ha contactado con la Guardia Civil y otras comisarías para recopilar toda la información sobre esta persona, que en el momento de su detención estaba indocumentado, pero que pudo ser identificado.
El ‘modus operandi’ de este grupo criminal es conocido por las fuerzas y cuerpos de Seguridad. Suele utilizar un ‘campamento base’ (casa rural, apartamento...) para establecerse de forma provisional y desde allí trasladarse a las zonas donde cometer los robos. A pesar de las restricciones por el covid, han conseguido colarse y moverse por rutas alternativas por Vigo y su área, ya que se sospecha que están relacionados con la ola de robos cometidos en Baiona.
Estos delincuentes están muy preparados, incluso ante una posible detención, utilizando distintas identidades y guardando silencio para obstaculizar el trabajo policial.
Las hipótesis apuntan a que los tres que lograron escapar a pie por el monte fueron recogidos por alguien de apoyo.
El vehículo en el que se desplazaron hasta la calle Viveiro, un Volvo S60 de color negro fue inspeccionado por la Policía. Dentro se encontraron pasamontañas y otros efectos compatibles con los hechos delictivos que se les atribuyen.
No es la primera vez que este tipo de grupos criminales actúan en la zona sur de Pontevedra. El año pasado, fueron detenidos otros tres individuos por medio centenar de asaltos en toda Galicia. También utilizaban coches de alta gama y se camuflaban entre los vecinos del entorno durante el día para poder vigilar sus objetivos. En los domicilios, actuaban de forma rápida para llevarse únicamente joyas y dinero, y las cajas fuertes que, tras abrirlas y llevarse el contenido, dejaban abandonadas en cualquier lugar cercano.n
