Las cuentas entran en vigor este mes tras rechazarse las 11 alegaciones presentadas
Vigo tiene al fin aprobados sus presupuestos municipales para 2014 cuando ya se ha consumido más de la mitad del año. Ayer se consumó el trámite y PSOE y PP dieron su visto bueno definitivo a las cuentas, por 228 millones de euros, al rechazar las 11 alegaciones presentadas por colectivos y partidos -entre ellos IU y BNG- y ratificar el voto ambas formaciones, que sumaron 23 de los 26 concejales presentes. Faltaba un edil del PSOE para redondear una mayoría histórica -el 90 por ciento de la Corporación- y probablemente irrepetible.
El debate fue mínimo -la sesión duró menos de una hora- por dos razones. Por un lado, porque ya se habían dado explicaciones en la aprobación inicial, hace algo más de un mes y no había variado nada. Por otro, porque había en la sala un grupo de vecinos de Teis que protestaron ruidosamente por la situación del centro cívico del barrio, lo que llevó a suspender el pleno 20 minutos y a reducir las intervenciones. No se oía nada.
Quizá lo más llamativo fue la absoluta ruptura al menos en apariencia entre PSOE y BNG, socios durante siete años, hasta hace apenas unos meses. La portavoz socialista acusó al BNG de haber montado el número en el pleno "con dirigentes de CIG y BNG presentes entres los vecinos" y el alcalde remató la faena asegurando que "se aprobaron los presupuestos pese a los que están contra la ciudad de Vigo".
Para completar el cuadro, los concejales del PSOE se pusieron a charlar entre ellos en sus "escaños" de forma evidente y ruidosa cuando le tocó intervenir a la portavoz del BNG, Iolanda Veloso, en "represalia" por los gritos de los vecinos cuando hablaba Silva.
Lo poco que se le pudo escuchar fue en defensa de las cuentas "más sociales" de la historia de Vigo y de rechazo al BNG, una constante en su turno. Entre las partidas presupuestarias, destacó los dos millones que destinarán a paliar las situaciones generadas por la crisis, como las ayudas para la electricidad o energía, así como los 1,6 millones que destinarán a educación, cultura y empleo, y los 12 millones en subvenciones al transporte.
Por su parte Iolanda Veloso, cuyo discurso fue acogido con aplausos del público, negó que se trate de unos presupuestos "sociales", puesto que "no promueven el empleo" y "expulsan a los vecinos para dar beneficio a empresas privadas".
En esta misma línea, dijo que se han reducido 700.000 euros en los convenios de empleo y 1,2 millones en ayudas sociales directas, y se han suprimido las partidas destinadas a bonotaxis, al programa Sereos y a la asociación de vecinos de Teis, razones por las que han decidido votar en contra. La portavoz del BNG insistió en criticar un "pacto inédito entre PP y PSOE" un pacto que "no habla por el bien de la ciudad" sino que es "el pacto de la derecha, de los monárquicos; el pacto de la vergüenza". En este sentido, ha recriminado que se trata de un acuerdo "por el bien del Partido Socialista y del alcalde, sobre todo", ya que responde al interés de Caballero de "aferrarse al cargo" y tiene un fin "puramente electoral". Con este pacto, dijo, populares y socialistas pretenden "reforzar el bipartidismo".
La intervención del portavoz popular, Chema Figueroa, fue acallada por los vecinos de Teis auque insistió en que están "apoyando a Vigo". Además, se dirigió al BNG para recordarle que Abel Caballero es alcalde "porque lo decidieron sus tres votos" y que en el pasado el BNG colaboró con el PP para que Corina Porro fuera alcaldesa.
Por su parte, los vecinos mostraron varios carteles indicando que "el cívico es de Teis". Además, acusaron a los concejales del PSOE y el PP de ser unos "mentireiros" y unos "caraduras" y recordaron a Caballero que Príncipe perdió la Alcaldía por Teis (la empacadora) .
Aunque el PP de se había comprometido a buscar una salida para que la Asociación de Vecinos de Teis pueda mantener la gestión del centro cívico del barrio -pero sin vinculación con la aprobación presupuestaria-, las críticas se dirigieron a los dos grupos. Carmela Silva llegó a decir al final que "se iban a acabar los privilegios de algunos". Los vecinos iniciaron movilizaciones al no haber en los presupuestos una partida para el centro cívico que el gobierno municipal pretende privatizar este centro y "convertirlo en una empresa". n
