Xosé Manuel Pazos, el alcalde de Cangas, puso el contrapunto en la inauguración cuando aseguró desde la tribuna que la autovía era una buena ventaja "para el Morrazo y para Vigo" en comodidad "y también en seguridad, esperemos, porque el Corredor tenía problemas", pero puso peros al "efecto llamada". Pazos advirtió de que la mayor cercanía provocará un "efecto llamada en el verano, no vamos a prohibir que vengan a las playas, pero es preocupante", advirtio, no sin antes pedir a Núñez Feijóo una mejora de la carretera de Hío y Aldán.
El presidente del Ejecutivo autonómico subrayó por su parte con respecto al Morrazo que la Xunta prevé nuevas actuaciones. En concreto, señaló que culminará la puesta en valor del Castro de Montealegre, en Domaio, salvado durante la construcción de la autovía, mediante uno nuevo proyecto de excavación que desarrollará el departamento de Patrimonio Cultural, que consolidará el yacimiento. También anunció una solución singular articulada por la Agencia Gallega de Infraestructuras para garantizar la total estabilización del talud del ramal de Cangas de esta autovía, que consistirá en la ejecución de un falso túnel para evitar nuevos desprendimientos. En el campo de la movilidad, Núñez Feijóo se refirió también al Plan de transporte metropolitano, reiterando el descuento en los billetes y la gratuidad en los desplazamientos para los menores de 19 años y recordó que en este verano se iniciará la obra de la Estación Intermodal de buses de Vigo, “al tiempo que conseguimos desbloquear el centro Vialia”.
