"¿Ah, pero se puede bailar?", preguntan dos jóvenes minutos antes de entrar en un pub en Areal. Pues sí, se puede, pero con mascarilla y sin tocarse. "Es la nueva normalidad, es raro pero todo es acostumbrarse", dicen. Los más fieles a la noche no fallaron el fin de semana y fueron a tantear el ambiente vigués nocturno. "Es el pistoletazo de salida", señalan los encargados de los locales que recibieron a sus primeros clientes entre dudas y algunos nervios que pronto se disiparon al comprobar el buen acondicionamiento de la inmensa mayoría de los pubs y discotecas de la ciudad.
Brais, encargado del Barrocco.
“no podemos hacer de policías, apelamos a la responsabilidad de la gente”
Vera, responsable de Ferré.
“tenemos mascarillas por si alguien se le olvida y personal controlando”
Edu, encargado de La Posada.
“acotamos la barra y pusimos alguna mesa dentro para mantener las distancias mejor”
DJ Gugy.
“la gente tiene ganas de bailar, yo me encargo de la música y limpio mi material”
Tania y Lucila.
“venimos a ver cómo está el ambiente, teníamos ganas de ver a más gente aunque es todo bastante raro”
Dani y Alexis.
“teníamos muchas ganas de salir, algunas cosas de la nueva normalidad son absurdas”
Eric y Philippe.
“somos de francia, nos está gustando vigo y la experiencia de noche está siendo bastante buena”
Evelyn Rodríguez.
"Es otro concepto de la noche y hay que asumirlo, seguro que va bien y nos acostumbramos”
Armando y Víctor.
“se echaba en falta la música y bailar, veníamos con algo de miedo pero estamos muy tranquilos”
Nuria, María, Paula y Blanca.
“preferimos terraza porque bailar con mascarilla es un rollo, hay que acostumbrarse pero es raro”
José Luis Asenjo y su hijo Luis, dueños de La Radio y Boom Boom Room, en Churruca, y Gatsby y Tokyo en Areal.
“se abre una nueva era en la noche viguesa, el público aún está aterrizando y nosotros expectantes”
Gustavo, encargado del Gatsby, y Tita.
“se pueden reservar zonas dentro del local y el aforo limitado hará que mucha gente venga antes”