VIGO

Los 60.000 test del Gobierno no sirven para las residencias

La residencia de Aldán ya está controlada por el Sergas, que medicalizó su funcionamiento.
photo_camera La residencia de Aldán ya está controlada por el Sergas, que medicalizó su funcionamiento.
Familiares y trabajadores están satisfechos con el trabajo de la Xunta en estos centros

 Los 57.760 test rápidos enviados esta semana por el Ministerio de Sanidad “no tienen utilidad clínica para poder poder hacer un cribado para descartar casos de coronavirus en residencias y entre los profesionales sanitarios”. Esto afirman los profesionales que forman parte de la Comisión de gestión de la crisis sanitaria  Covid-19 de Galicia. El doctor José Vázquez Lima, miembro del comité de crisis, explicó que “no son útiles desde el punto de vista clínico”, porque no permiten distinguir si se trata de una fase aguda, y por lo tanto si puede haber contagio, o si ya se está en una fase de curación. Debido a esto, sería necesario realizar una prueba complementaria de PCR. Los test del Ministerio solo detectan si se producen anticuerpos pero no permiten saber si se trata de una fase aguda del  coronavirus o si aún permanecen en sangre porque ya hay curación.

Por otra parte, aclaró que ahora está evaluando la posibilidad de destinar estos test a la realización de un estudio epidemiológico para obtener información sobre la exposición de la población al virus.
Por otro lado, tanto los familiares de los usuarios de las residencias de DomusVi de Barreiro y Aldán como la Plataforma gallega de trabajadores de estos centros respaldaron ayer la gestión que está realizando en estos centros una vez que fueron intervenidos por la Xunta por el elevado número de contagios de coronavirus. El portavoz de la asociación, Paulino Campos, destacó que en la residencia de Cangas, donde habian surgido críticas, se trabaja ya de forma organizada y con suficiente personal, incluso con médico en el turno de noche. Señalan que la intervención, llevada a cabo hace una semana, se tenía que haber hecho cuando la pidieron el 17 de marzo y que aunque al principio hubo dificultades para medicalizar los centros residenciales ahora funcionan correctamente. La petición  que hacen ahora es una comunicación más fluida para saber de sus familiares.

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