Naturaleza por los cuatro costados

En mucho puntos el trazado serpentea compartiendo espacio con la vegetación y bosques de ribeira que invaden el entorno.
photo_camera En mucho puntos el trazado serpentea compartiendo espacio con la vegetación y bosques de ribeira que invaden el entorno.

La senda del río Fraga o Regato das Tres Regueiras se encuentra en Baredo y discurre entre ocho molinos 

En pleno corazón de Baredo se encuentra la senda fluvial que transcurre siguiendo el cauce del Regato das Tres Regueiras. Un recorrido que abarca 1,5 kilómetros de longitud aproximadamente y que conecta la parte más baja del núcleo baionés con el de interior. La inclinación del cauce fluvial provoca que el agua baje con fuerza, sobre todo durante el invierno y en épocas de precipitaciones, lo que provocó el asentamiento de personas en el núcleo rural al tratarse de un entorno con tierras muy fértiles y que a su vez motivó la construcción de ocho molinos de los cuales en la actualidad están rehabilitados tres y uno de ellos, el de mayor tamaño está en venta. 

El sinuoso trazado fluvial provoca varios saltos de agua combinados con un recorrido sobre una pasarela construída en madera. Esta discurre a poca altura del mismo con un ancho de metro y medio. Las  especies arbóreas autóctonas se entremezclan con alguna que otra invasora como el eucalipto, aún así predomina el bosque de ribeira que combina a la perfección con prados y montañas. Lo cierto es que el verde rebosa por los cuatro costados y se hace muy agradable el sonido del agua constante por todo el recorrido y es curioso como se adaptó la plataforma del paseo en el entorno dando prioridad al contexto en el que se encuentra por ello serpentea entre escuadras, recortes, puentes y pasarelas. Además ramas y hojas invaden el espacio en muchos puntos danto al conjunto un aspecto más virgen.

Su construcción se llevó a cabo en dos fases, la primera tuvo que ser rehabilitada hace aproximadamente cinco años debido a su deterioro estructural sumado a una tormenta, que dejó al conjunto inservible. El segundo tramo y más reciente, comprendido desde A Ponte hasta A Torre, se remató a principios de este mismo año.

Para poder acceder al recorrido se puede hacer desde tres puntos diferentes, el primero y más bajo desde la PO552 en la ensenada da Bombardeira, el segundo desde el Camiño O Sinal, el tercero a la altura de la carretera de Ponte a muy pocos metros del inmueble que durante décadas albergo el establecimiento “Paco Baredo” y finalmente en la zona más elevada de las cuatro en el lugar de A Torre.

Los ocho molinos de Baredo son de canal, se utilizaban para la molienda del maíz y cuentan con estructuras de canalización del agua que recuerdan a pequeños acueductos. Están dispuestos en función del cauce y los tres rehabilitados son conocidos como “Cogulado de Arriba, del Medio y de Abajo”. A su vez comparten río con los de O Barreiro, Da Maquía, O Pinicho, O de Estrella, A Foupa y A Torre. Este último el más llamativo de todos dadas sus grandes dimensiones y verticalidad. Sobre el inmueble se hicieron actuaciones recientes como la colocación de una placa divisoria y un tejado nuevo.

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