Una semana y un millón de euros ficticios para invertir en cualquier mercado bursátil e intentar sacarle el mayor rendimiento. Esa era la premisa a la que Luis –nombre ficticio, pues quiere mantener el anonimato– y otras 15 personas se enfrentaron en la segunda edición de la Competición de Bolsa organizada por el profesor de la UVigo Jorge Vila Biglieri.
Luis, que es un antiguo alumno de la Facultad de Económicas y actualmente trabaja como técnico de prevención de riesgos, se hizo con el primer puesto con un balance de +33.000 euros, esto es, un incremento de más del 3% de la inversión inicial. Lo hizo por delante de dos estudiantes del IESIDE.
Este exalumno, que ya había participado en la primera edición, aunque “no me fue tan bien”, indica que el resultado fue “totalmente inesperado”. Para llegar a imponerse a los otros 15 participantes, Luis tiró de conocimientos previos –se había formado a través de diferentes métodos y cursos– y, tras “una mezcla de coincidencias, suerte y análisis”, la suya fue la cuenta que, tras una semana, había sacado mayor rendimiento a ese millón de euros ficticio que le habían entregado.
En esta peculiar competición, los 16 participantes trabajaban con uno de los brokers –intermediarios en el mercado bursátil– que los inversores utilizan en su día a día y con los datos que los diferentes mercados marcaban cada jornada prácticamente en tiempo real.
Lo que más le costó, asegura, fue aprender a usar el mencionado broker, pues “es uno de los mejores pero es realmente complejo”. Tanto es así que “prácticamente hay que formarse para saber utilizarlo”. La parte buena es que hay una infinidad de videotutoriales disponibles para todo aquel que desee comenzar a usarlo.
El premio que Luis se llevó por imponerse a sus rivales fue una matrícula gratuita al próximo curso de “Advanced Trading” que se impartirá en la Facultad de Económicas de la UVigo. Curso al que ya acudió en el pasado y confiesa que “me sirvió mucho”.
Gracias a esta incursión autodidacta en el mundo de la bolsa y a su victoria en el simulador, este exalumno de la UVigo empezó recientemente a “hacer mis pinitos” en los mercados bursátiles reales. Eso sí, “ahí soy mucho más prudente que en la vida real”, bromea. Un hobby que comenzó a raíz de la pandemia y que le puede llevar a generar importantes ingresos adicionales a largo plazo.
