La Senda Verde de Chapela se unió al tramo de Vigo a finales del pasado año. Desde ese momento, el éxito de la vía fue innegable hasta el punto de conseguir una bandera que la cataloga como uno de los mejores senderos de toda España.
Gracias a la rehabilitación del antiguo tramo de la vía del tren, que llega a escasos metros del centro comercial Vialia de Vigo, son muchos los vecinos que emplean esta senda para transportarse de forma sostenible, pasear a sus mascotas o tener un punto de encuentro con sus amistades. “Como vecina pienso que esta medida es una maravilla. Gracias ella te encuentras sin problemas con mucha gente que, de otra forma, no te encontrarías por la calle”, cuenta Silvia, usuaria diaria del camino.
La gran parte de los usuarios coinciden en un punto: la rehabilitación de la vía era algo necesario. Muchos de ellos afirman que la parroquia redondelana se ha llenado de vida desde su inauguración, debido a la gran cantidad de gente que emplea la senda. A pesar de ello, los usuarios inciden en la falta de árboles, fuentes y bancos a lo largo de los cuatro kilómetros que componen la senda. “Nosotras no podemos hacer todo el tramo de un tirón. Solo te puedes sentar sobre algún cacho de cemento y cocerte bajo el sol porque no hay muchos árboles”, relatan dos vecinas de Chapela.
El tramo de Chapela, que contó con una inversión de 778.000 euros, lo forma un sendero de 1,6 kilómetros que finaliza en la zona del antiguo apeadero de Chapela donde, ese antiguo hueco destinado a los trenes, se convierte en una gran plaza pública, centro neurálgico del camino en Redondela. El trazado cuenta con una vía que comparten ciclistas y peatones, con zonas de descanso y vegetación.
