Una de las víctimas fue supuestamente golpeada por su expareja cuando llevaba a su hijo de 19 meses en los brazos
Vigo registró el pasado fin de semana una de las peores oleadas de violencia machista en lo que va de año con un total de diez detenidos en 48 horas, según confirmaron fuentes policiales.
Mientras durante el confinamiento, los episodios de malos tratos en la ciudad se redujeron, la nueva normalidad ha vuelto a incrementar las denuncias y los arrestos.
Uno de los incidentes más graves tuvo lugar el sábado. Una patrulla de la Policía Local detenía un hombre después de que su expareja afirmara haber sido agredida cuando llevaba a su hijo de tan sólo 19 meses en los brazos. Según su relato a lo agentes, el detenido le habría propinado supuestamente empujones y golpes logrando tirarla al suelo, hechos por los que se quejaba de dolor en la mano derecha y en la espalda.
Esa misma noche, en la zona de Samil, la Policía Local acudía por un aviso de reyerta entre varios jóvenes. Una vez allí, explicaron fuentes de la jefatura municipal, tras identificar a los presentes, se comprobó que uno de ellos tenía en vigor una orden de alejamiento por un delito de malos tratos a una joven, presente también en el grupo y quien aseguró haber sido agredida por éste, por lo que fue arrestado.
Agarrada de los pelos y por el cuello para que no abandonara la vivienda. Otra joven contaba a la Policía cómo había sido agredida de madrugada por su pareja en el interior del domicilio que comparten. El aviso fue dado por los vecinos sobre las dos de la madrugada del sábado al escuchar una fuerte discusión de pareja. Una patrulla se desplazó hasta el inmueble y se entrevistó con la mujer, tras lo cual, procedió a la detención del presunto agresor, de 21 años.
A estas tres detenciones realizadas por la Policía Local, se suman otras siete de la Policía Nacional, varias de ellas relacionadas con el incumplimiento de órdenes de alejamiento dictadas por el Juzgado de Violencia de Género para proteger a las víctimas.
Mientras durante el confinamiento, los episodios de malos tratos en la ciudad se redujeron, la nueva normalidad ha vuelto a incrementar las denuncias y los arrestos.
Uno de los incidentes más graves tuvo lugar el sábado. Una patrulla de la Policía Local detenía un hombre después de que su expareja afirmara haber sido agredida cuando llevaba a su hijo de tan sólo 19 meses en los brazos. Según su relato a lo agentes, el detenido le habría propinado supuestamente empujones y golpes logrando tirarla al suelo, hechos por los que se quejaba de dolor en la mano derecha y en la espalda.
Esa misma noche, en la zona de Samil, la Policía Local acudía por un aviso de reyerta entre varios jóvenes. Una vez allí, explicaron fuentes de la jefatura municipal, tras identificar a los presentes, se comprobó que uno de ellos tenía en vigor una orden de alejamiento por un delito de malos tratos a una joven, presente también en el grupo y quien aseguró haber sido agredida por éste, por lo que fue arrestado.
Agarrada de los pelos y por el cuello para que no abandonara la vivienda. Otra joven contaba a la Policía cómo había sido agredida de madrugada por su pareja en el interior del domicilio que comparten. El aviso fue dado por los vecinos sobre las dos de la madrugada del sábado al escuchar una fuerte discusión de pareja. Una patrulla se desplazó hasta el inmueble y se entrevistó con la mujer, tras lo cual, procedió a la detención del presunto agresor, de 21 años.
A estas tres detenciones realizadas por la Policía Local, se suman otras siete de la Policía Nacional, varias de ellas relacionadas con el incumplimiento de órdenes de alejamiento dictadas por el Juzgado de Violencia de Género para proteger a las víctimas.
